Locales | 07 Jul El exintendente Julio Pintos rechazó que durante su administración municipal, la planta de carpeta asfáltica se mantuviera cerrada, sin “una utilización acorde a lo que era su capacidad productiva”, según las declaraciones del director de Obras, Nicolás Olivera.
Pintos explicó que “la planta asfáltica tiene reparaciones debido a los años de uso y en aquel momento se realizó una inversión importante en el entorno de U$S 40 o 50.000. Eso consta en las notas hechas por EL TELEGRAFO”.
El exintendente departamental detalló que “se usó la planta para hacer las carpetas entre las calles Larrañaga y avenida Salto, donde se repararon 33 cuadras, después en Dr. De Herrera, Vizconde de Mauá, José Pedro Varela y Montecaseros. Algunos tramos se hicieron completos y en otros, se reconstruyeron una o dos cuadras”.
Pintos resaltó que se eligieron esas calles “porque son ingresos y salidas de la zona norte hacia el centro de la ciudad y después calle Charrúas, desde Bulevar Artigas hasta Juncal, porque en el caso de Charrúas, es uno de los ingresos más importantes de la zona Este hacia la ciudad”.
Asimismo, recordó que “posteriormente la planta asfáltica se utilizó mucho para el bacheo con material caliente, incluso para el interior del departamento, así que la planta funcionó siempre en la Administración Pintos”, aunque reconoció que “estuvo parada durante la reparación, o sea que se hizo un uso acorde”.
El exjerarca reiteró que la planta “estaba perfectamente habilitada con las reparaciones y eso consta en la propia Dirección de Obras” de la Intendencia. En cuanto a la capacidad productiva, Pintos aseguró que en realidad “se desconoce su alcance, pero financieramente es insostenible tenerla todo el tiempo funcionando y la actual administración tampoco la pondrá a pleno sino que lo hará en función de la planificación de las tareas”.
Asimismo subrayó que durante el ejercicio anterior “hicimos 1.100 calles y esta administración no ha podido completar 150”, en tanto “detuvieron el plan de recuperación vial que estaba pronto con el Fondo de Desarrollo del Interior (FDI)” y consignó que mientras estuvo en la Intendencia, el fondo se ejecutó a “un promedio de 250 cuadras por año y durante el primer año en el cargo, la totalidad del presupuesto se destinó al centro”.
Pintos indicó que cuando asumió recibía $34 millones del mencionado fondo, al tiempo que “actualmente la cifra se ubica en $54 millones”.
Acerca de la calidad de la carpeta asfáltica construida durante su administración, Pintos invitó a “que vayan a ver las calles y el excelente tratamiento que se hizo, porque hasta ahora están en perfectas condiciones”. Sin embargo, “las calles de la actual administración no duran ni tres meses; si no, vean cómo está Baltasar Brum entre avenida Soriano y Río Negro, que a los 15 días le estaban haciendo bacheo”, enfatizó.
Pintos explicó que “dejaron de reparar las calles porque desarmaron los equipos y no usaron las máquinas, que estuvieron paradas dos años. Entonces, se perdió todo el aprendizaje que se había hecho en la administración anterior. Además hacen calles dispersas sin planificación por zonas, sino a demanda; es decir, cuando alguien llama por teléfono y se queja mucho, le hacen la calle”.
La crónica
En la edición del 25 de julio de 2009, en una entrevista realizada por EL TELEGRAFO al entonces director general de Obras de la comuna, ingeniero agrónomo Marco García, indicaba que “la planta de asfalto de la Intendencia produce entre 600 y 800 toneladas mensuales, lo que significa la cantidad necesaria para cubrir de diez a doce cuadras lineales por mes a un costo de unos U$S 64.000”.
En aquella oportunidad, la planta había recibido un mantenimiento que “implicó una inversión importante.
El horno de la planta, donde se funde el material necesario para la fabricación del asfalto, fue hecho a nuevo hace unos dos años (2006-2007)”. En la crónica, García recordaba que “la producción de la planta de asfalto está determinada por el uso que le da el gobierno departamental, no obstante lo cual también se produce ‘para afuera’. Por ejemplo, es el caso del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, que cuando necesita para las rutas nacionales, se le suministra carpeta.
En el caso de las empresas privadas, que también pueden necesitarlo, se ha recibido algún planteo, pero se está buscando la forma administrativa de solucionar la venta de asfalto a privados”, resaltaba el exdirector.
En un comunicado de prensa de la Intendencia de Paysandú del que diéramos cuenta el pasado jueves, el actual director de Obras, Nicolás Olivera, expresó que  durante los cinco años anteriores a la administración de Bertil Bentos la planta de asfalto “estuvo cerrada” y “no se le dio una utilización acorde a lo que era su capacidad productiva”, mientras que actualmente gracias al material que genera los contribuyentes se benefician con trabajos de calidad que repercuten en un mayor confort.