Paysandú, Jueves 11 de Julio de 2013
Locales | 08 Jul El subsecretario del Ministerio de Industria Energía y Minería (MIEM), Edgardo Ortuño, afirmó que las empresas recuperadas por los trabajadores en Uruguay deberán demostrar sostenibilidad y compromiso, en tanto, reconoció que no hay empresas cooperativas construidas desde el origen, si bien lo permite la ley de creación del Fondes.
Ortuño presenció la presentación de la nueva colección de tejidos de Tessamérica y consignó a EL TELEGRAFO que “el Ejecutivo aportó recursos para la reparación de los techos, en una tarea coordinada con la Intendencia y el Fondes que financió el proyecto, conjugando el aporte entre lo público y lo privado”.
El jerarca ministerial destacó que el éxito de la propuesta se basa en “trabajar en las líneas adecuadas para lograr sostenibilidad y que haya expansión, porque la suerte de la industria textil uruguaya y de estos emprendimientos está centrada en la calidad del trabajo nacional”.
Asimismo visitó Paycueros, donde tomó contacto con el tratamiento de efluentes, que “es otro elemento clave de las políticas de desarrollo sustentable, fomentadas por el gobierno” y recordó que “se vienen proyectos importantes con la inversión de ALUR”, que a través del biocombustible “generará una visión integradora” con la producción de biocombustible, electricidad y alimento animal.
Consultado en torno a la cantidad y realidad económica de las empresas recuperadas por los trabajadores, Ortuño expresó que “ha aumentado en virtud de los crecientes instrumentos establecidos desde el Estado para generar apoyo, tales como el Fondes o los Fondos Industriales” que gestiona el MIEM.
En cuanto a la capacidad productiva, el subsecretario reconoció que “Funsa no tiene colmada la capacidad de trabajo, al igual que Paylana o la Curtiembre El Águila en Florida, pero es significativo que los trabajadores hayan recuperado las empresas para desarrollar líneas de exportación, que es desde donde vemos la sostenibilidad de estos proyectos”.
Según el jerarca, el ministerio prioriza las áreas de capacitación, formación y apertura de mercados “para que estos emprendimientos no se queden con la recuperación de lo que había, sino que generen las transformaciones necesarias y se vuelvan viables porque por algo quebraron las empresas que le dieron origen”.
Otro enclave productivo simbólico ha sido la recuperación de Metzen y Sena, donde los obreros se encuentran “asumiendo la nueva etapa de gestión que suponen las responsabilidades de productividad, eficiencia y cumplimiento para que el esfuerzo no sea en vano”, indicó.
Ortuño reconoció que el impulso cooperativo “apuesta a la viabilidad de las empresas con la solidaridad en la distribución de las ganancias de los proyectos, enmarcado en un desafío de mayores responsabilidades y compromisos”. En referencia a las históricas reivindicaciones de obreros hacia patrones, un aspecto que en estos emprendimientos no se registra, el subsecretario consignó que “todavía son experiencias aisladas para una economía como la nuestra, donde los trabajadores deberán asumir las responsabilidades de la gestión que antes estaban en manos de los empresarios”.
Incluso “será una etapa de contradicciones, en las cuales no solo deberán responder por la suerte individual sino de los demás compañeros y la empresa”, expresó Ortuño e insistió en “la experiencia interesante desde lo productivo, económico y social”.
No hay nuevas
En los últimos años han aumentado las empresas recuperadas y aunque la ley de creación del fondo prevé la formación de nuevas empresas cooperativas, es decir, que parten desde cero, esa “no ha sido la tónica hasta el momento”.
Ortuño reconoció que el principal desarrollo estuvo orientado a la recuperación de emprendimientos, pero el desafío mayor se encuentra en el surgimiento de empresas con capital “semilla” o con “capital piloto” desde el origen, con un cien por ciento en manos de los trabajadores o en sociedad con empresarios en las áreas necesarias.
Parque industriales
“El MIEM apunta al desarrollo de los parques industriales como un instrumento productivo y de generación de puestos de trabajo, que no ha avanzado en los ritmos que preveíamos, pero que crece con el objetivo de generar polos de producción en el Interior”, dijo el subsecretario.
En tal sentido, se han efectuado cambios a la ley de promoción de los parques industriales, otorgando facilidades a las empresas para su instalación, “pero tenemos que trabajar aún más en las condiciones que beneficien al rol del desarrollador, cuya tarea es considerada esencial. El desarrollador articula la promoción del parque con las infraestructuras comunes y la captación de emprendimientos para su radicación enmarcados en procesos de mediano plazo, pero que una vez consolidados generan un impacto positivo”, señaló.
En la presente Rendición de Cuentas a estudio del Parlamento, el MIEM impulsa “la declaración de parque industrial --con los beneficios que esto conlleva--, al Parque Científico y Tecnológico de Pando, de modo de incursionar en una modalidad no tradicional agrupando a empresas de alta tecnología con cursos intensivos de conocimientos y alto valor agregado, que es una de las cadenas productivas donde Uruguay tiene una mayor perspectiva”.
En Montevideo, aspiran al desarrollo de un polo industrial naval a través de “una política de recuperación de la industria naval en el país, fundamentalmente Montevideo y el litoral. En los acuerdos estamos trabajando con Brasil para abastecer su demanda y que esto permita el desarrollo de un sector muy importante”, informó.
Ortuño adelantó que para tal iniciativa, la Dirección Nacional de Pequeñas y Medianas Empresas (Dinapyme) cuenta con los recursos necesarios y lineamientos para impulsarlos.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Jul / 2013
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com