Locales | 14 Jul La Intendencia sanducera, a través de la Dirección General del Departamento de Obras, comenzó la tarea de reposición de bolardos destruidos o arrancados en sectores de la semipeatonal de 18 de Julio, a la vez que también está construyendo cordonetas en sectores donde los automovilistas puedan invadir la zona peatonal, e incluso han dañado rejillas de los desagues, previéndose extenderlo a toda la semipeatonal.
Así lo indicó a EL TELEGRAFO el director general del Departamento de Obras, Dr. Nicolás Olivera, quien precisó que “estamos reponiendo bolardos en la semipeatonal y a la vez instalando las cordonetas, como elementos de contención entre los bolardos”, en base a la coordinación “entre el proyectista y la Dirección de Tránsito, con el asesor Lucas Facello”.
“La idea es que los vehículos no pisen o estacionen sobre las rejas y no las dañen, como ha venido ocurriendo”, precisó el jerarca, al destacar que las cordonetas son construidas en hormigón, de una altura de unos quince centímetros por doce de ancho, y un metro de largo.
Consultado sobre si este elemento estaba contemplado en el proyecto original, indicó Olivera que “no, se trata de un elemento que hemos agregado en base a lo que se percibe en el funcionamiento de la semipeatonal”, por lo que se ejecuta el trabajo a través de personal municipal. Explicó el director general de Obras que se ha detectado que sobre todo los bolardos son derribados en el sector de estacionamiento de vehículos, y que a la vez cuando se abren las puertas de los rodados ha ocurrido que se golpean estos elementos, por lo que la idea ha sido adecuar la situación a la forma de funcionamiento.
Por lo tanto en los estacionamientos se dejarán solo tres bolardos por cada tramo, y entre éstos se colocan las cordonetas para que no se invadan las rejillas y la zona peatonal.
Las cordonetas serán pintadas de amarillo y se incorporarán a todo el tramo de la semipeatonal, aclaró Olivera.
En cuanto a los bolardos “hemos readecuado la cantidad, colocando tres en el lugar de estacionamiento entre las islas, justamente para no dificultar la apertura de la puerta de los autos”, y la reposición se hace con bolardos de similares características a los dañados