Rurales | 12 Jul Según la ley aprobada por el Parlamento y que espera la promulgación del Poder Ejecutivo, la integración del Instituto Nacional de Carnes (INAC) fue ampliada con la incorporación de un nuevo integrante del sector frigorífico vinculado al abasto de carne al mercado interno y otro delegado compartido por dos gremiales de ganaderos, que se suma a las dos ya existentes. El INAC está integrado actualmente por dos representantes del Poder Ejecutivo (presidente y vicepresidente), dos delegados de la industria, que pertenecen a la Asociación de la Industria Frigorífica del Uruguay (Adifu) y Cámara de la Industria Frigorífica (CIF) y dos de las gremiales ganaderas (Asociación Rural del Uruguay y Federación Rural).
Con la citada modificación legal ingresan ahora a INAC en representación del sector ganadero, un delegado compartido entre la Comisión Nacional de Fomento Rural (CNFR) y Cooperativas Agrarias Federadas (CAF), cada uno con períodos de 12 meses y otro delegado en representación de la Asociación de Plantas de Faena del Mercado Interno. De esta manera, la junta del INAC aumenta de seis a ocho integrantes: dos por el Poder Ejecutivo, tres delegados de la producción ganadera y tres del sector industrial.
Durante la discusión parlamentaria de la iniciativa desde el inicio del actual período de gobierno, tanto los representantes del Poder Ejecutivo como del sector privado de la actual junta de INAC, consideraron que no era necesario modificar la integración de un organismo que estaba funcionando de manera exitosa. La nueva integración de INAC comenzará a aplicarse a partir de la próxima renovación de la junta directiva del organismo. El presidente de la Comisión Nacional de Fomento Rural (CNFR), Mario Buzzalino, destacó a El Observador que esta decisión es de estricta justicia, al considerar que “el grueso de nuestros afiliados –que es importante en número, pero no en cantidad de animales– son productores ganaderos familiares y por esa razón es muy importante integrar un ámbito donde se toman decisiones tan trascendentes”. El presidente de CAF, Daniel Vago, coincidió con Buzzalino en que era el reconocimiento a una aspiración en la que se venía trabajando desde hace muchos años. El argumento manejado es que CAF está integrada como una federación de empresas cooperativas y sociedades de fomento rural, integradas en cadenas de valor relacionadas al agronegocio. Por lo tanto, este sería el aporte diferente que haría CAF, según indicó, para enriquecer la discusión e incrementar la masa crítica de manera que el instituto pueda tomar las mejores decisiones.