Locales | 06 Ago El ingeniero agrimensor forestal Carlos Pellegrino se encargará de un plan paisajista en la costa sanducera. La Intendencia de Paysandú acaba de contratarlo, por el período de tres meses, como consultor para elaborar una propuesta general de acondicionamiento del área que se extiende desde la Avenida de los Deportistas, frente al Club Remeros, hasta calle Antonio Estefanell, de la franja costera. Deberá plantear y rediseñar el área, con alineamientos de árboles, arbustos y plantas ornamentales, trabajando en conjunto con técnicos de la Intendencia sanducera.
Por otra parte, Pellegrino redactará un borrador de una Ordenanza de Arbolado Público de Paysandú; presentará un informe técnico de base de interpretación de la dinámica de costas del río Uruguay en colaboración con un especialista competente; un análisis del sitio con relevamiento fotográfico; y planos del reacondicionamiento.
Asimismo desarrollará un plan piloto de reforestación en la costa sanducera, en la manzana al norte del Museo de la Tradición, donde se talarán todos los árboles existentes (restan 47) y se procederá al acondicionamiento del área. Allí se plantarán 70 ceibos y lapachos rosados, así como mataojos y otras especies autóctonas. En el caso de los árboles serán ejemplares de alrededor de dos metros de altura, provistos por el Vivero Municipal.
“Con esto podremos observar el crecimiento y el impacto que el lugar provoca en la población. Tenemos muy claro que los eucaliptos no son apropiados para la costa del Uruguay, y por el contrario estamos convencidos que estas especies sí lo son, permitiendo asimismo observar la costa argentina, que en esa área es muy interesante”, dijo.
Por otra parte aseguró que “los eucaliptos deberían desaparecer del área en unos años. Es claro que se no se puede hacer de un día para el otro, por la tradición, por los recuerdos que la población mantiene, pero es claro que no son apropiados. Hay otras maneras de jerarquizar la costa, hay otros árboles”.
Pellegrino quiere asimismo incorporar al proyecto que presentará a la Intendencia muelles flotantes sobre el río, a manera de miradores, y esculturas que se levanten desde el agua en vidrio y madera.
“Es un trabajo complejo, que necesariamente debe tomar en cuenta a la población, pero que al mismo tiempo debe tener criterios técnicos. Y en ese sentido, aunque suene extraño y más allá de las enfermedades que hoy afectan a los eucaliptos en la costa, lo que es claro y concreto, estos árboles no son los apropiados”, destacó.
En tanto, se continúa con el trabajo de corte y talado de árboles en la zona de la costanera. El contrato autoriza hasta un total de 260 toneladas, de las cuales se han cortado 117.