Deportes | 02 Sep Llegó temprano con la esperanza a cuestas. Sabía que tenía que ganar y mascaba bronca, porque el líder del campeonato jugaría más tarde, con resultado visto. En la cancha, Rampla intentó sacarse de la cabeza esta insólita situación de que los candidatos al título jugaran en horario diferentes. Y se dedicó a jugar al fútbol para cumplir con su cuota parte, y esperar luego lo que sucediera entre Independencia e Independiente.
Así fue que el picapiedra selló una goleada por 4 a 0, y se fue tranquilo. El resultado mantenía el sueño. Y en la cancha Rampla mandó de principio a fin, en un partido por momentos entreverado, pero que siempre tuvo al equipo de Walter Corrales buscando el protagonismo.
Daglio, la figura del partido, fue tejiendo los hilos del equipo bajando a recuperar la pelota e intentando darle buen destino. El delantero, tras gran jugada de Cáceres, fue partícipe del primer gol del partido. Y Cáceres se mandó un golazo espectacular para afirmar el resultado.
Centenario no reaccionaba. No le encontraba la vuelta, no podía generar los espacios necesarios para juntarse en ofensiva frente a un equipo que mordía en todos los sectores de la cancha, y al que se le anuló un gol por un fuera de juego dudoso en esa primera etapa.
El gringo sí salió dispuesto en el complemento. Y Rampla optó por esperar, ver qué ofrecía el rival y apurar de contragolpe.
Y la receta le salió perfecta. Porque Centenario desperdició un par de chances claras en esa segunda etapa, y Rampla no perdonó. Aumentó Daglio de cabeza, y Pino cerraría el tanteador en complicidad con el golero rival.
Llegó el pitazo final y el plantel festejó con su hinchada. Rampla ya se sentía campeón por la sencilla razón de que hizo lo que tenía que hacer y de que llegaba a la definición cuando el primer objetivo de la temporada era la permanencia.
Horas más tarde el festejo se trasladaría a la sede: Independencia cayó con Independiente, y el picapiedra se transformó en el campeón del Apertura.
Fue allí, en su sede, donde pudo levantar la copa. Aunque fue una lástima que el equipo y su hinchada se quedaran sin vuelta olímpica. STB