Locales | 04 Sep Entre la noche de hoy y durante las siguientes 48 horas, las comunidades judías del mundo festejan Rosh Hashaná, el inicio del año para el calendario hebreo. Aquí comienza el primer día del séptimo mes del año hebreo (Tishrei), considerado por la tradición mosaica como el de la creación del hombre.
De hecho, éste no es el primero sino el más relevante de los comienzos del año que marca el calendario hebreo. ¿Por qué ello? La tradición judía tiene una fuerte connotación antropocéntrica, el mundo fue creado con el único sentido que el hombre lo pueble y transforme. De acuerdo al relato bíblico, el hombre es socio de la creación y a él son atribuidas cualidades casi divinas. Según el extendido aforismo, el hombre fue creado “a imagen y semejanza de Dios”. Sus capacidades pero también sus responsabilidades son extensas.
Rosh Hashaná da inicio a los llamados Yamim Noraim, que incluyen los diez días siguientes, hasta Yom Kippur (Día del Perdón). Durante este intersticio, cada hombre procede a repensar y repensarse en su vínculo con sus semejantes. Es el tiempo específico del arrepentimiento, la disculpa y el ceder. De esta manera, los Yamim Noraim están destinados a reforzar el buen relacionamiento al interior de las familias, las comunidades y las sociedades.

ALGUNAS TRADICIONES
Así como ocurre en otras festividades, Rosh Hashaná está rodeada de tradiciones. Como símbolo de un año dulce, predominan las comidas como la manzana y miel. Los niños preparan postales para sus amigos y familiares. También se come pescado, con el sentido de un año prolífico, y especialmente una cabeza de pescado, con la connotación simbólica de estar a la vanguardia y no a la retaguardia. Otra costumbre es vestir ropas nuevas, así como acercarse a algún río o fuente de agua para vaciar los bolsillos de migas y pedir el ingreso al nuevo año libre de pecados y transgresiones. Principalmente, se trata de pasar un tiempo en familia y en comunidad, mirando hacia atrás con ojos críticos y compasivos; y hacia adelante con creatividad y esperanza.