Locales | 18 Oct Casi 300 niños y jóvenes sanduceros participarán del proyecto “Promoviendo habilidades para la vida y la ruralidad adolescente”, que tiene por objetivo llegar a los más alejados rincones del departamento para promover acciones que mejoren las facilidades de acceso a salud y educación.
La iniciativa se basa en la instalación de un ámbito de coordinación y gestión interinstitucional, enfocado en la creación de una política pública local de adolescencia y juventud rural, así como a la creación de un sistema integral de acceso a servicios con énfasis en la salud y la formación con gestión interinstitucional y participación ciudadana de jóvenes y mujeres.
En la víspera, en Paysandú Innova se presentaron detalles del mismo, con la presencia del intendente Bertil Bentos, Pilar González, adjunta a la ministra de Salud Pública, Carlos Fagetti, coordinador del programa Uruguay Integra, Carlos Damico, coordinador departamental del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), y Sebastián López, de la comisión directiva de la Agencia para el Desarrollo Productivo.
En setiembre pasado, Bentos firmó en Montevideo un convenio con el Área de Políticas Territoriales (APT) de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), y con el Programa de Cohesión Social y Territorial (Uruguay Integra), a través del cual se ejecutará en Paysandú el proyecto “Promoviendo habilidades para la vida y la ruralidad adolescente”.
Junto a la intendencia, que lo ejecutará, actuarán como socios los ministerios de Educación y Cultura, el de Desarrollo Social y el de Salud Pública; ASSE, UTU, la Facultad de Medicina, Comepa, la Agencia de Desarrollo Productivo, y los municipios de Porvenir, Quebracho y Guichón.

DIECIOCHO LOCALIDADES
El proyecto --de 18 meses de duración-- se desarrollará en 18 localidades del interior del departamento de menos de 1.000 habitantes, a saber: Cañada del Pueblo, Cerro Chato, Arbolito, Tiatucurá, La Tentación, Arroyo Negro, Cuchilla del Fuego, Zeballos, Queguayar (Santa Kilda-Palmares de Quebracho), Araújo, Soto (La Cuchilla), Beisso, Piñera, Merinos, Piedra Sola, Morató, El Eucalipto y Bella Vista (San Mauricio, Santa Blanca). En total involucrará a 298 jóvenes de entre 10 y 29 años, que viven en 657 hogares con una población total de 2.812.
La docente del Departamento de Medicina Familiar y Comunitaria de la Udelar, Diana Domenech, explicó que se trata de un proyecto interinstitucional e interdisciplinario, que posee “una complejidad muy particular” y además “está dirigido a la juventud y adolescencia del medio rural” vulnerable por sus dificultades para acceder a servicios básicos tales como salud y educación. Uno de los objetivos es integrar una mesa de adolescencia y juventud rural, con participación de instituciones públicas y privadas del ámbito social, de la salud y de la educación, con plan de sostenibilidad aprobado. También buscará integrar al menos ocho espacios de referencia, participación y acción de los adolescentes y jóvenes, que funcionarán a través del liderazgo de pares y con gestión interinstitucional, para lograr concretar pequeños proyectos de promoción de salud juvenil y actividades socio comunitarias.

POLÍTICA DE DESCENTRALIZACIÓN
“Para la intendencia representa todo un desafío, que asumimos con ganas, con responsabilidad, porque sabemos que quienes van a integrarlo en nuestra representación lo van a hacer con el mismo afecto, con el mismo cariño que abrazan, no solamente la función municipal, sino también sus propias profesiones”, enfatizó Bentos y recordó que el desarrollo también se gesta en el interior de los departamentos, “no solamente desde las capitales”.
El proyecto “nos permite la ejecución de una política de descentralización que ha sido norte en esta Administración, desde el momento que asumimos. Por ahí pasa esa contemplación al interior del departamento -en este caso de Paysandú., en una franja etaria realmente muy numerosa, que lamentablemente no ha tenido la motivación que puede tener un adolescente radicado en una ciudad capital como Paysandú”, expresó Bentos. Mientras tanto, el coordinador del programa Uruguay Integra, licenciado Carlos Fagetti, brindó detalles del proceso que desembocó en la estructuración del proyecto, donde se logró la articulación de políticas nacionales y departamentales, así como la alianza con once socios que contribuirán a la concreción de los objetivos planteados. González puntualizó que la salud rural y la descentralización constituyen “dos prioridades establecidas por el presidente José Mujica”, que se tradujeron en la creación del Plan de Salud Rural, cuyos objetivos incluyen la disminución de las brechas de desigualdad en el acceso integral a los servicios de salud, mediante el fortalecimiento de los equipos de salud rural y el acceso a la capacitación y educación permanente.
Damico, en tanto, destacó la utilización de “la herramienta interinstitucional para la construcción de políticas públicas” dirigidas “a las poblaciones objetivo”, en tanto aludió a un reclamado “proceso de construcción de una descentralización” que también se traduzca en recursos. Proyectos como éste –agregó- “facilitan llegar a colectivos donde históricamente han estado fuera del alcance de las políticas nacionales; han tenido los derechos pero no los han podido ejercer”.