Nacionales | 04 Nov Más de 20 embarcaciones con ambientalistas protestaron en el río Uruguay contra la planta de celulosa de UPM con un fuerte operativo de la Armada uruguaya para controlar la marcha. Los asambleístas fueron río abajo desde el puerto de Gualeguaychú hasta el puerto de la papelera, donde leyeron una proclama en la que acusaron a nuestro país de violar los tratados y a la empresa de contaminar el río.
En declaraciones a El Observador el médico dirigente de la Asamblea Ciudadana Ambiental, Martín Alazard, dijo que los manifestantes se concentraron de forma “pacífica y sin agresividad”, y entendió que fue “exagerado” el despliegue de la Armada uruguaya para controlar la marcha, que contó con helicóptero, fusileros navales y buzos tácticos, entre otros 150 militares desplegados entre el puerto de UPM y el puente San Martín.
Agregó que además de concentrarse para recordar “la vigencia de esta lucha que lleva 10 años”, respecto a los conflictos surgidos desde que se instaló la pastera, Alazard informó que los asambleístas aprovecharon para “rendir homenaje a tres compañeros fallecidos”, que formaban parte del grupo ambientalista, por los que realizaron un minuto de silencio.
“Uruguay preparó la flota como si esto fuera una invasión extranjera”, manifestó el ambientalista, insistiendo que “indudablemente Uruguay está jugando por la empresa finlandesa, que está usufructuando su madera y le va a dejar un río contaminado. No renunciaremos a seguir peleando por esta papelera contaminante e ilegal”, sentenció Alazard.
Por su parte, el organizador de la marcha, Raúl Almeida, dijo a El País que la consigna de la manifestación era la “salud de nuestro río Uruguay”.
“Uruguay no tiene ninguna información de los monitoreos de Botnia (por UPM). Nosotros, los que vivimos acá, nos damos cuenta de la afectación que tiene porque los que estamos sobre la pastera somos nosotros, tanto Fray Bentos como Gualeguay-chú”, explicó. “Es triste ver a dos gobiernos, que se dicen que son progresistas, como le dan la espalda al pueblo y dejan hacer a las multinacionales lo que quieran. Destruyen nuestros recursos naturales”, agregó. Almeida reflexionó sobre un pensamiento artiguista: “Nunca iba a entregar la riqueza del país por la necesidad del pueblo. Están entregando un recurso espectacular a las multinacionales que lo destruyen y dejan contaminación”.