Rurales | 07 Nov (Por Pablo Blanc). El solo hecho de mencionar Esteban Bosco Ruiz me retrotrae a la niñez. Porque desde muy chico conocí a quien muchas veces escuché nombrarlo como “un tipo bueno”. Sencillo y amable en el trato, volví ya en la profesión de periodista a tratarlo en forma más corriente y redescubrir que esa denominación era correcta.
Mi memoria me lleva a los primeros años de la década del 80, cuando en el local “Domaral” ubicado en el kilómetro 94 de ruta 26, Aníbal Mario Cardona realizaba sus ferias ganaderas, y Bosco participaba en varias ocasiones en la conducción del remate.
Llegar al local con mi padre era prácticamente habitual todos los meses, y verlo a Bosco sentado fumando un cigarro y esperando para iniciar la subasta, era una tradición.
Ya en la función de periodista y cubriendo mis primeros remates para EL TELEGRAFO, a inicios de la década del 90, el trato fue más fluido y el conversar con él previo a cada remate era una constante.
Frases como “ganado de Guichón, ganado de excepción”, o “compre Normando y saldrá ganando”, aún quedan en mi mente, y ni hablar de Bosco sacudiendo la campana para iniciar el remate, o llamando la atención cada vez que entraba “un ganadazo”, como le gustaba decir, expresiones que vuelven a mi cada vez que llego a la Liga del Trabajo de Guichón.
Ese terruño que lo vio crecer en esta otra profesión, que supo abrazar con fuerza, cuando aún siendo funcionario del Banco de Paysandú, por 1963, la institución bancaria resuelve intervenir en los negocios rurales y Bosco acepta el desafío de ser el rematador y gerenciar los negocios en la zona.
Hoy, siguiendo su línea, Mercedes Margaleff, compañera de la vida de Bosco y su sobrino Marcelo Cravea, siguen con el legado, que a los 25 años, cuando se celebraba ese cumpleaños, destacaba la responsabilidad, seriedad, honestidad y profesionalidad que Bosco implementaba.
festejos
“Es el momento de agasajar a todos aquellos que nos han acompañado en estos años del escritorio”, indicó Marcelo Cravea respecto a los festejos que este sábado se cumplirán desde las 21 en uno de los galpones del predio del local de la Liga del Trabajo de Guichón.
“Queremos devolverle a la gente, amigos y clientes, parte de las atenciones que han tenido con nosotros”, manifestó el rematador.
La actividad comenzará con palabras de quienes han tenido contacto directo con Bosco, como Luis Alberto “Mellizo” Alvez, el primer secretario del escritorio; el ingeniero José Luis Tuneau, actual presidente de la Asociación Rural de Tacuarembó, quien vivió un momento muy especial junto a Bosco cuando se realizó el reparto de la sucesión de su abuelo y recibió el asesoramiento en la realidad de un proceso productivo.
También hablará Gerardo Zambrano, contando sus vivencias junto a Bosco, y por último, la parte oratoria será cerrada por el intendente de Paysandú, Bertil Bentos, para recordar aquellos momentos que integraban el equipo deportivo de la radio Guichón, en donde Bosco era el relator y Bentos el comentarista.
“Muchos amigos nos decían que teníamos que festejar los 50 años trabajando. Por eso se nos ocurrió filmar 9 lotes de ganado, con clientes que habitualmente no comercializan con el escritorio”, explicó Cravea.
Posteriormente habrá una cena show con grupos como “Castigados por Amor” y “Bocha” Favre, para cerrar el festejo de los primeros 50 años de Escritorio Esteban Bosco Ruiz.