Policiales | 09 Nov Cuantiosos daños se registraron en comedores, baños, corredores, salones de clases y enfermería, que quedaron anegados a un nivel de 10 centímetros sobre el piso debido a la rotura de las cañerías de OSE, como resultado del motín en el Centro de Rehabilitación Paysandú, excárcel departamental, durante el cual se incendiaron colchones, se destruyeron los tableros de energía y las puertas.
Los amotinados también entraron a la farmacia, donde, además de causar daños, robaron e ingirieron medicamentos. Como consecuencia, un total de 14 reclusos identificados como promotores del motín fueron trasladados en la mañana de ayer a otos establecimientos; siete a “Cerro Carancho” de Rivera, cinco al Penal de Libertad y dos a la cárcel departamental “Las Rosas” de Maldonado.

NUEVE HORAS EN EL PODER
La cárcel sanducera permaneció en poder de los reclusos durante toda la madrugada, pese a diálogos que permitieron arribar a un acuerdo. Las negociaciones incluyeron la salida de un recluso a pedir calma a los familiares que reclamaban en la puerta. “Está todo bien, no hay ninguno lastimado; vamos a estar hasta la madrugada si pinta” expresó el hombre para calmar a las familias. Tras la salida del recluso se permitió el ingreso de cinco familiares para ver la situación. “Estamos más tranquilos porque los vimos bien”, declararon al salir del establecimiento.
“Está viniendo en camino el director nacional de Cárceles” indicó el juez Fernando Islas al retirarse del lugar del motín, y añadió que “se llegó a un acuerdo de que, al amanecer, van a comenzar a ingresar tranquilos, cada uno a su celda”.

ARRIBÓ DIRECTOR NACIONAL
“A las 10.45 del jueves, aproximadamente, comenzó el motín en los módulos (pabellones) 7 y 8 (ubicados en el nivel superior del establecimiento), luego se desplegó a otros módulos, con la participación de entre 90 y 100 internos de un total de 227”, informó en conferencia de prensa el director del Instituto Nacional de Rehabilitación, inspector mayor Luis Mendoza, en conferencia de prensa brindada junto al director del Centro de Rehabilitación Paysandú, comisario Alfredo Coelho, en la mañana de la víspera, en las afueras del establecimiento, al que no se permitió ingresar a ningún medio.
Añadió que los amotinados “tomaron de rehenes a dos internos alojados en el pabellón destinados a procesados por delitos sexuales, para seguidamente solicitar la presencia de representantes de medios de prensa y del juez”.
Una vez que se accedió a que dialogaran con el juez Fernando Islas, los amotinados entregaron a los dos rehenes, quienes fueron trasladados por la Policía al Hospital Escuela del Litoral. Uno recibió una herida cortante de arma blanca en el abdomen y el otro sufrió hematomas en la cara.

ENTRARON DE MAÑANA
“Cuando a las 7.45 de la mañana, ya calmados los ánimos, se ingresó al establecimiento, se encontró en el mismo sector a otros cuatro con lesiones contusas”, añadió el inspector mayor Mendoza, quien puntualizó que “dentro del código carcelario, los internos alojados por delitos sexuales son discriminados por los demás”. A raíz del estado en que quedó el establecimiento, se suspendieron las visitas porque hay que acondicionar los espacios destinados a ellas, así como, por idéntico motivo, se suspendieron los cursos talleres educativos. Los internos serán los encargados de la recuperación de los espacios.
“OSE nos está dando una mano en la reparación del ramal principal, y una vez que esa parte esté pronta, los propios internos se van a encargar de reacondicionar los espacios anegados y, una vez culminada esa labor, se repararán los daños en la instalación eléctrica”, explicó por su parte el comisario Coelho, quien añadió que los amotinados “obstaculizaron mediante incendios la rampa de acceso y otros puntos de ingreso, pero la mayoría de los pabellones no resultaron afectados”.
Respecto a los promotores del motín, señaló que se trata de “gente que es reincidente y que, de alguna manera, ya ha participado en estos incidentes lamentables, y es una lástima porque se trata de pequeñas células de personas que no piensan en los demás”.

EL APAGÓN DETONANTE
El detonante del motín fue la extensión de un corte de energía eléctrica que UTE había anunciado hasta las 16 y continuaba a las 22, así como otras reivindicaciones planteadas por los reclusos relacionadas al régimen disciplinario y aspectos relacionados con el funcionamiento interno.
“Yo creo que UTE debería haber considerado que si nos dijeron que a las 16.30 retornaba la luz, tendría que haber retornado a esa hora” declaró a la prensa el director del establecimiento, en medio del motín.
“Nosotros insistimos, con el muchacho que estaba cargo de la cuadrilla, porque para nosotros la luz es fundamental para la seguridad. Nos respondieron reiteradamente que volvería en media hora, luego otra media hora y luego otra media hora. Nosotros se los transmitíamos a los internos, y, cuando no se cumplió con lo prometido, la situación se nos fue de las manos”.