Policiales | 14 Nov Uno de los responsables de un taller mecánico en donde se cobraba $ 800 por cambiar el número de motor a motos robadas en distintos lugares de la ciudad fue procesado junto a otros dos mayores y un menor, en un exitoso operativo llevado a cabo por personal de la Seccional Tercera de Policía.
El procedimiento comenzó cuando efectivos de esa dependencia obtuvieron datos que permitieron sospechar que dos hermanos que explotaban un taller mecánico en la zona de Larrañaga y Héctor Rodríguez Nolla podrían estar vinculados al hurto de una moto a una mujer de 24 años desde las cercanías del Anfiteatro del Río Uruguay. La investigación permitió también saber que la moto hurtada habría sido comprada en 2.000 pesos por J.M.F., de 20 años, repartidor de un expendio de comidas cercano a un instituto de enseñanza.

REPARTIDOR DETENIDO
En consecuencia, se allanó el domicilio de J.M.F., se lo condujo detenido y se recobró la moto hurtada. Durante la indagatoria, admitió que había comprado la moto en la suma indicada a N.S.A., de 18, domiciliado en la zona de avenida Soriano y Entre Ríos, quien se la ofertó junto a un menor domiciliado en las inmediaciones del barrio Municipales I. Añadió que, por recomendación, concurrió a un taller de dos hermanos para que le cambiaran el número de motor a efectos de evitar que el birrodado fuera reconocido como hurtado en caso de que lo detuviera la Policía, pagando $ 800 pesos por ese servicio. Inspeccionada la moto recuperada en el allanamiento, se constató que poseía un motor cuya numeración correspondía a otro birrodado hurtado a una mujer de 33 años en Washington y Ciudad de Young el 29 de octubre.

ALLANARON EL TALLER
Ya con estos elementos en su poder, los policías de la Seccional Tercera allanaron el taller mecánico, en donde fue recuperada una cantidad importante de motores, tapas de motores y matrículas correspondientes a motos robadas en distintos puntos de la ciudad. Conducidos detenidos los responsables del taller, confesaron que cobraban $ 800 pesos por cambiar la numeración de las motos, trabajo que llevaban a cabo con un minitorno, a pesar de que sabían que los birrodados eran hurtados. Paralelamente, fueron indagados N.S.A. y el menor nombrados por el repartidor como vendedores de la moto. El mayor negó las imputaciones vertidas en su contra, pero el menor dijo que ambos robaron la moto en el Anfiteatro y luego se la vendieron al repartidor, al que le recomendaron que le cambiara el número de motor en el taller.
En conocimiento, la jueza penal de Cuarto Turno, Jimena Alonso, dispuso la conducción de los detenidos y el procesamiento sin prisión de J.M.F. por un delito de receptación, del mecánico A.V. por reiterados delitos de receptación, y de N.S.A. por un delito de hurto especialmente agravado. Asimismo, resolvió iniciar un proceso infraccional al menor como autor inimputable de un delito de hurto, imponiéndole como medida cautelar la obligación de concurrir al Centro de Estudio y Derivación de INAU durante 45 días.