Cooperativa Cusaf

Locales | 15 Nov La Cooperativa Uruguaya Solidaria de Afiliados (Cusaf) respalda la ley de bancarización que promueve el gobierno, teniendo en cuenta que entre otros aspectos contempla abatir las tasas máximas de interés que se pueden cobrar por el sistema bancario a quienes toman crédito, según destacó a EL TELEGRAFO el presidente de la entidad, licenciado Eduardo Evangelista, quien se hizo presente en Paysandú días atrás.
Asimismo se reunió con personas tomadoras de créditos de nuestro departamento, a efectos de considerar si son objeto de usura en los préstamos concedidos por entidades financieras, y en el caso de que se tengan dudas, los interesados pueden concurrir a la sede de Artigas 1086, en nuestra ciudad, con el vale del crédito, para determinar si se es víctima de usura. “Hemos comunicado en primer lugar el alcance que va a tener la ley de bancarización sobre los asalariados, los que deben comenzar a pensar por qué ventanilla van a querer cobrar sus remuneraciones, porque lo va a poder hacer por los bancos o por las cooperativas de ahorro y crédito”, explicó Evangelista.
“A su vez también tiene que ir seleccionando cuál va a ser la empresa que responsablemente ha operado en plaza, ver las ventajas y las deficiencias por otro lado. Debemos expresar que Cusaf comparte los objetivos de la ley de bancarización, y coincide con la idea del gobierno de topear la tasa de interés, lo que es fundamental para que no haya situaciones de usura, o de abuso de créditos como tiene hoy el sistema financiero”, precisó. Respecto a la fecha de vigencia de la ley indicó que “todavía va a demorar, porque recién entró en discusión en Cámara de Diputados, lo que quiere decir que siguiendo el criterio de tratamiento de las leyes va a estar 45 días en la Cámara Baja, otro tanto en la Cámara de Senadores, y de ahí saldrá la promulgación”.
“Una de las inquietudes que tiene esa ley, que es un punto con el que ni las cooperativas ni los bancos están de acuerdo, es reducir el alcance del tope de tasas. Hoy el tope de tasas en crédito está en el 60 por ciento y en crédito compensatorio en el 80 por ciento. Hoy está regulado por la ley 18.212, y lo que se pretende con esta ley es que ese tope tan alto se reduzca al 10 por ciento, lo que va a evitar que las instituciones financieras se aprovechen de la situación de quien pide crédito cobrándole cantidades enormes, porque no es lo mismo el 10 que el 60 por ciento”, puntualizó.
“Lo que se busca es reducir justamente el sobreendeudamiento en los créditos y buscar que la gente los pague, por lo que se apunta a abaratar el valor del dinero que se pide”, precisó.
Observó que “la bancarización tiene implícito que quien le paga el sueldo, si le da un crédito, es el primero que tiene derecho de retención sobre ese sueldo, y si esa institución no le da crédito y otra si le da, si la primera no entra lo hace la segunda, porque así va a funcionar el sistema”.

CASOS DE USURA
ANTE LA JUSTICIA
Por otro lado, en Paysandú “hemos informado sobre una serie de casos de los que ya hemos presentado denuncia penal por créditos de usura, tratándose de entidades financieras que operan en plaza. A los ciudadanos que operan con financieras de plaza les recomendamos que pasen por Cusaf con un vale de ese crédito para determinar si no están siendo objeto de intereses abusivos”, consideró.
En el caso de Paysandú, quienes tengan sospecha de que son víctimas de este tipo de abusos pueden dirigirse a Artigas 1086, donde se les examinará la documentación --a un costo de 250 pesos-- para un estudio minucioso de su situación. “Si encontramos que hay usura, le vamos a indicar que se asocie a la cooperativa a efectos de iniciar el proceso de denuncia penal contra la institución que aplica usura”, observó Evangelista. “Estamos satisfechos porque tenemos la posibilidad de seguir recorriendo el país, como lo hacemos desde hace diez años en Cusaf, y lo importante es que la gente sepa que hay una puerta donde acudir, que seguimos estando al servicio del deudor y que en definitiva el mundo no se termina con el primer endeudamiento. A la gente que está endeudada le decimos que se arrime, que hay soluciones que es posible construirlas, cuyo plazo máximo son 36 meses para sacarse de arriba las deudas, lo que permite cambiar la pisada para quienes se encuentran en situación de sobreendeudamiento, saliendo de la horca del sistema financiero”, explicó. “Eso es lo que ha hecho Cusaf durante estos diez años, y a su vez la ley de bancarización que se está propiciando tiene en el fondo la voluntad política de que la gente no sea más endeudada en forma aviesa, porque en definitiva lo que los bancos hacen es aprovecharse de su capacidad sobre el deudor y lo inducen a tomar créditos que son realmente exorbitantes para el bolsillo de quien lo pide, teniendo en cuenta el aprovechamiento que hacen los bancos del tope de tasas”, apuntó.
“El banco sabe que como puede cobrar entre un 60 y un 80 por arriba, se aprovecha de la desesperación de quien precisa la plata, y lucra con ese sistema y por eso tiene esas ganancias”, indicó.