Paysandú, Sábado 18 de Enero de 2014
Rurales | 16 Ene El ingeniero agrónomo Esteban Hoffman, docente e investigador de la Estación Experimental “Dr. Mario A. Cassinoni” (Eemac) de Facultad de Agronomía, señaló a EL TELEGRAFO que “venimos de un porcentaje más alto de cultivos de primera que 2012-2013, y que además están muy bien, pero el panorama con lo de segunda ha sido muy dispar, con empresas que están muy bien y otras que no a causa de la falta de precipitaciones en momentos clave”.
Las lluvias que se dieron en una parte del mes de noviembre, en esta zona de Paysandú y hacia Young “complicaron la siembra de los cultivos de soja de segunda. Productores que no podían cosechar lo de invierno tampoco podían sembrar de verano”, sostuvo.
Entiende que hay más área de siembra de segunda que el año anterior. Respecto a lo que se sembró temprano, “la cosa venía bien pero de repente se nos fue el agua, especialmente cuando estábamos por empezar a sembrar lo de segunda”. Esto determinó que quedara un área importante, “sobre todo de soja sin sembrar. Y cuando comenzó a llover sobre fines de diciembre se terminó de sembrar”, precisó. Sobre el estado de la soja indicó que “el de primera hoy está bien, y en los cultivos de segunda dependerá de la empresa”, acotó.
“Algunas sembraron a tiempo, y a empresas que tenían más proporción de trigo con fecha de siembra más tardía, les quedó una cola mayor sin sembrar”.
“Hay que gente que se animó a sembrar” sostiene, pero las lluvias previstas para Navidad “no vinieron”, generando algunos problemas de implantación, “por lluvias tardías, también resiembra, con algunas empresas que tienen un porcentaje bastante importante, y otras no”, dijo. En términos generales, para Hoffman en el sur “se sembró más tarde pero con poca resiembra. De todas maneras hay empresas a las que les ha ido muy bien igual”, enfatizando que sus dichos “son muy válidos para el promedio y no para empresa-empresa”.
“Hay una asimetría muy grande, porque debe tenerse en cuenta, cuando se largaron a sembrar, qué porcentaje de primera y segunda tendrían, y dentro de la de segunda, cuánto hay arriba de la cebada y cuánto arriba del trigo; además, los suelos juegan mucho y algunos tienen suelos con capacidad de cosechar y sembrar rápidamente sin problemas de agua, y otros cuando fueron a sembrar se les había acabado el agua”, acotó.
Dependencia
Para el técnico y docente de la Eemac, la dependencia que tiene el agricultor de nuestro país del agua “es total”. Primero, “porque Uruguay es un país que tiene un porcentaje importante de siembra de segunda. Cuando se cosechan los cultivos de invierno, generalmente el suelo está vacío de agua”.
Precisó que “nuestros suelos no tienen almacenaje de agua. Puede llover mucho, pero almacenamos poco; el cultivo que domina es la soja, y ésta tiene el período de mayor necesidad de agua muy lejos de la siembra, entonces aunque partamos del suelo a tiro, el agua no da para llegar y debe llover al medio del desarrollo y generalmente eso es en enero. Pero lo común en Uruguay es que en el primer mes del año no llueve”.
Otro aspecto en el que Hoffman enfatizó es la irregularidad de precipitaciones por zonas. “Hay lugares donde en diciembre les llovió más de 80 milímetros, y hay gente que no llega a 25. Si a eso se le suma que en Paysandú tenemos suelos con muy poca capacidad de almacenaje, de Paysandú al norte, desde Constancia para arriba y hasta Chapicuy, hay zonas que están muy secas”.
Para el profesional es fundamental un mes de febrero con lluvias. Recordó entonces la zafra 2011-2012, cuando diciembre y enero fueron muy secos, “y cuando se pensaba que se terminaba todo, comenzó a llover y la situación cambió”.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Ene / 2014
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com