Deportes | 16 Ene El fútbol sanducero se movió bien. Desde la Liga se dejó en claro: OFI habilitó el Parque Estudiantil, la Policía no podía dar seguridad pero Paysandú comprometía guardia privada, y no se hacía responsable de ningún tipo de desgracia en caso de que se volviera a jugar el fin de semana en el Estadio Artigas a las 17 y 19, con un calor insoportable.
Y se cedió. El fútbol sanducero ganó una parada importante, y terminó por hacer valer el derecho de localía, el mismo que le permite decidir el horario de los partidos por el Litoral Norte.
Confirmada la buena nueva para los sanduceros, que además pueden soñar con algún peso más de recaudación (ante Salto se recaudó la mitad del clásico del año anterior) esperan que los hinchas acompañen para hacer pensar la cercanía del público y se transformen de verdad y con comportamiento ejemplar en el jugador número 12, en el Parque Estudiantil se ultiman detalles. La cancha está espectacular, según la recorrida realizada en la víspera por EL TELEGRAFO, los vestuarios cambiaron su cara y la iluminación ni que hablar, más allá de que hoy se colocarán más focos que brindarán una iluminación espectacular. Mañana, en tanto, la cancha (que está marcada para tal fin con estacas), será pintada.