Paysandú, Miércoles 29 de Enero de 2014
Locales | 25 Ene OSE decidió realizar un nuevo proyecto para la planta de tratamiento de líquidos residuales de Paysandú, elevando la calidad del tratamiento con la finalidad de contar con una descarga que cause mucho menos impacto en el río Uruguay. El proyecto que se había realizado para Paysandú era para una planta de pre tratamiento. El nuevo, mucho más ambicioso y con un grado superior de tratamiento, asegurará una mayor inocuidad del vertimiento de los líquidos residuales al curso de agua aunque, en la práctica, dilatará los plazos de concreción de la obra.
Aunque el sitio web de Presidencia de la República informó en la víspera que la de Paysandú es una de las plantas de tratamiento que OSE prevé finalizar en el transcurso de 2014, fuentes del organismo consultadas por EL TELEGRAFO señalaron que este año sólo se prevé finalizar el nuevo proyecto para Paysandú y realizar la licitación correspondiente así como los trámites de autorizaciones ante la Dirección Nacional de Medio Ambiente y la Comisión Administradora del Río Uruguay.
De acuerdo a lo previsto, la planta de tratamiento a construirse en nuestra ciudad representará una inversión de entre 16 y 20 millones de dólares.
MAYORES EXIGENCIAS AMBIENTALES
Sin bien hace varios años se habla sobre la posibilidad de la construcción de esta obra de fundamental importancia para Paysandú, por distintas razones ha sido una obra largamente postergada.
Recientemente, a través de una importante inversión realizada en Paysandú, OSE llevó adelante un plan de obras para aumentar la cobertura de alcantarillado domiciliario en Paysandú, habiéndose anunciado que el paso siguiente será la construcción de una planta de tratamiento de líquidos residuales diseñada con las tecnologías adecuadas para preservar la calidad de los cuerpos receptores, en nuestro caso el río Uruguay, al que en la actualidad son vertidos sin ningún tipo de tratamiento los efluentes cloacales de toda la ciudad así como el contenido de los pozos negros existentes.
Consultada al respecto, la gerente de Saneamiento de OSE, ingeniera Gabriela De Freitas, explicó a EL TELEGRAFO que el proyecto anteriormente existente --que estaba presentado ante la Dirección Nacional de Medio Ambiente-- era para la construcción de una planta de pre tratamiento y que con el transcurso del tiempo “han ido aumentando las exigencias ambientales y en cuanto a las condiciones de vertido”, por lo que atendiendo a “la responsabilidad de la empresa de generar efluentes cada vez de mejor calidad, se evaluó realizar en el correr de 2014 un nuevo proyecto para construir una planta de tratamiento de nivel terciario”.
Respecto a las diferencias entre el proyecto manejado inicialmente y el que se diseñará este año, dijo que “una planta de tratamiento terciario es superior a lo previamente planificado”.
Explicó que una planta de pre tratamiento retiene los residuos sólidos gruesos y arenas, pero la mayor parte de la carga del efluente llega al río a través del emisario. En cambio, “una planta de tratamiento terciario reduce la materia orgánica y lo más importante es la reducción de las cargas de fósforo, nitrógeno y nutrientes”.
“Además debe cumplir con los parámetros bacteriológicos y de esa forma no hay afectación alguna al curso de agua”, añadió.
Plantas de este tipo cuentan con un sector de pre tratamiento y unidades de tratamiento secundario y terciario, lo que requiere mayor infraestructura e inversión que una planta de pre tratamiento.
Consultada respecto a las autorizaciones necesarias con las que deberá contar el nuevo proyecto, dijo que debe ser aprobado por la Dirección Nacional de Medio Ambiente y la Comisión Administradora del Río Uruguay.
No obstante, consideró que “hay un camino allanado porque todo lo que fue la tramitación del proyecto anterior ante Dinama, que llevó mucho tiempo, implicó el estudio de la implantación de la planta de el lugar elegido así como una serie de otras condiciones que ya fueron estudiadas”.
“El nuevo proyecto ejecutivo que se realizará este año es mucho más ambicioso que el anterior y con un grado superior de tratamiento. Lo que estamos proponiendo es generar un efluente de mucho mayor calidad, por lo que esperamos que se agilicen las autorizaciones”, añadió.
INVERSIONES IMPORTANTES EN PAYSANDÚ
La gerente de Saneamiento de OSE recordó que las plantas de tratamiento de Salto y Paysandú son las más grandes del Interior y forman parte de sistemas complejos que implican también la necesidad de la rehabilitación del sistema de saneamiento de las ciudades.
“Las inversiones en Paysandú han sido muy importantes, especialmente en lo que respecta a la rehabilitación del sistema de saneamiento, que fue una obra muy costosa y compleja que, si bien no se ve, ha permitido ampliar el servicio a muchos barrios”.
“Las mejoras son sustanciales y eso es el esqueleto de la red que permitirá llegar al punto de tratamiento. En Salto, a la inversa que en Paysandú, se comienza con la construcción de la planta de tratamiento pero luego habrá que trabajar en la rehabilitación de las redes”, dijo.
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