Deportes | 28 Ene Paysandú Wanderers había ganado la fase inicial del TLN perdiendo un solo partido en la larga campaña, pero después cayó en las finales ante Allavena por el título local.
Cuando comenzaba enero se volvieron a juntar sus jugadores locales, llegó de nuevo Piñeiro, única ficha nacional, y se comenzó a preparar para el Súper 4 sin extranjeros, quienes fueron “cortados”, y en silencio.
Apostó al plantel local, le ganó a Universitario como visitante y el domingo se coronó campeón al vencer a Juventus.
Finalizado el partido, con festejo pero sin la copa que no llegó, los jugadores exteriorizaron su alegría por ser campeones y lo más importante, jugar con los equipos de la Liga.
“Para nosotros esto es muy importante sobre todo porque teníamos un plantel bastante diezmado.
Pero aquí nos conocemos, nos teníamos fe, y por suerte esta especie de revancha, un premio que se nos da luego de una temporada larga. Se hizo un sacrificio, es bravo en esta época jugar, pero bueno, el objetivo está conseguido, es un premio y de aquí para adelante todos arriba”, expresó Marcos Carvalho.
“No...había dicho que iba a dejar, pero ahora voy a jugar la Liga porque clasificamos. Es el premio al trabajo que hicimos durante el año, con este grupito de gurises. Estamos en la Liga, ganamos el Súper 4, sin trofeo, pero igual, está en el trabajo nuestro el trofeo”, fueron los conceptos de Fernando Soria.
El juvenil Nicolás Comas cumplió con lo que el técnico le indicó, y después del juego nos decía que estaba “ tranquilo... jugando para el equipo, escuchar al técnico y hacer lo que nos pide. En el club nos teníamos confianza y así nos fue, ahora festejamos”. “Chapatín”