Paysandú, Jueves 06 de Febrero de 2014
Opinion | 30 Ene El Ministerio de Transporte y Obras Públicas lanzó una campaña audiovisual que compara las muertes por siniestros en el tránsito con las catástrofes naturales. Las piezas publicitarias muestran un terremoto en Plaza Independencia, un tsunami en Piriápolis y la erupción de un volcán en el Cerro de Montevideo.
“La gente tiene que saber que en Uruguay mueren por accidentes en calles y carreteras más personas que la que murió en el último terremoto de Chile”, dijo el ministro de Transporte y Obras Públicas, Enrique Pintado, tras el lanzamiento de la campaña y luego que la Unidad Nacional de Seguridad Vial informó que en 2014 se duplicó la mortalidad y se triplicó la incidencia del alcohol en los siniestros.
En 2013 murieron unas 567 personas, 57 más que el año anterior. El 56% murió en las ciudades y el resto en rutas nacionales. La mitad de los fallecidos iba en motocicleta, según los datos de Unasev.
Mientras que en los países desarrollados las muertes en siniestros de tránsito promedian las cuatro cada 100.000 habitantes, en Uruguay esta cifra alcanzó el 16,5 durante el 2013.
El 43% de las muertes ocurre los fines de semana, algo que la Unasev denominó como “período crítico”. Durante esos días, las alcoholimetrías positivas, que durante la semana promedian el 3%, suben a 8% el sábado y a 14% el domingo.
Si en Uruguay fallecieran 600 personas al año víctimas de alguna enfermedad contagiosa, viviríamos en un alerta permanente, buscando medios de prevención y tratando de cuidarnos cuanto pudiéramos. Si esa fuera la cantidad de conciudadanos que matara alguna catástrofe natural como las mencionadas, lo sentiríamos como un desastre y las personas que pudieran hacerlo se mudarían de las ciudades con riesgo de ser afectadas.
Sin embargo, la misma cantidad de personas --en su mayoría jóvenes-- mueren anualmente en el país en accidentes de tránsito sin que al parecer hagamos algo al respecto.
Eso es lo que intenta trasmitir la campaña que presenta el Ministerio y algo que desde hace mucho tiempo venimos diciendo. No se trata solo de tener la más avanzada legislación sobre seguridad en tránsito. No es creando leyes copiadas del primer mundo que se salvan vidas. Lo que hay que hacer ser realistas y trabajar sobre esa realidad, que dista mucho de la visión de Unasev. Por ejemplo, mientras se reglamenta el uso obligatorio de luces durante el día, aumentan las muertes por choques entre motos que en plena noche no se ven, porque no tienen luz; o cuando se piensa exigir el uso de sillas para niños de hasta 12 años --sin considerar la altura del menor--, un altísimo porcentaje de los conductores todavía ni siquiera usa cinturón de seguridad. De nada valdrán las campañas, lo que pueda escribirse y hasta las sanciones si no la población no se involucra, si cada uno de nosotros no asume que cada vez que tomamos el volante o conducimos una moto estamos ante una de las instancias más trascendentes de nuestra vida.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Feb / 2014
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com