Ministerio del Interior investiga
omisiones en llamado de emergencia

Policiales | 07 Feb La muerte de un hombre de 39 años cuyo cuerpo, mutilado en varias partes, apareció en Ruta 3 en las cercanías del arroyo Celestino, al parecer víctima de un accidente, es intensamente investigada por la Policía, en tanto el operador de la Mesa Central de Operaciones que en la madrugada atendía los llamados de emergencia podría ser relevado de sus funciones. Existen sospechas de omisiones registradas en el momento de atender los llamados telefónicos, lo que ameritó que el jefe de Policía, Alberto Camacho, ordenara una investigación que actualmente se encuentra ya en la órbita del Ministerio del Interior.
Luis Alberto Rodríguez Barreto, oriundo de Progreso, departamento de Canelones, sufrió estallido de cráneo con pérdida de masa encéfalica, múltiples fracturas, desviceración y mutilación de su cuerpo, diseminado durante aproximadamente 90 metros de la senda Oeste de la ruta, a la altura del kilómetro 338, próximo al citado curso de agua. La tremenda escena fue hallada por personal de la Seccional Cuarta de Policía cuando se hizo presente en el lugar luego de recibir dos llamados telefónicos. A través del primero de ellos se solicitaba la presencia de la Policía porque un hombre “se sentía mal”, en tanto por intermedio del segundo se informaba que una persona había sido arrollada por un vehículo.

NINGUNA PISTA
En el lugar no se localizó ningún vehículo ni persona que pudiera aportar datos acerca de la tragedia. Seguidamente, se trasladó hasta allí personal de Policía Caminera al mando de su jefe, suboficial mayor Richard Díaz, para interrumpir el tránsito vehicular a efectos de que el personal de Policía Técnica que se trasladó desde Paysandú pudiera practicar relevamientos tendientes a encontrar algún indicio que permitiera determinar la forma en que se produjo la muerte de Rodríguez Barreto, quien pudo ser identificado a través de la documentación hallada en sus prendas de vestir.
No obstante, el relevamiento técnico de la escena no permitió determinar la causa exacta de la tragedia. Ya para entonces, en el sitio de la tragedia se habían hecho presentes los directores de Seguridad, comisario Jorge Pintos, y de Coordinación Ejecutiva, comisario inspector Jesús Pereira.
En el terreno de las hipótesis, la primera causa probable de muerte que formuló la Policía fue un accidente de tránsito protagonizado por un camión u otro vehículo pesado cuyo conductor --consciente o no de lo sucedido-- prosiguió la marcha.

LLOVÍA COPIOSAMENTE
Esta hipótesis adquiere mayor fuerza si se tiene en cuenta que en el momento en que tuvo lugar el probable siniestro ese sector de Ruta 3 soportaba lluvias y vientos fuertes, producto de una tormenta que se desarrollaba al Norte de paraje San Manuel y que dificultaba notoriamente la visibilidad de los conductores. La escasa visibilidad pudo haber determinado que el conductor del vehículo que protagonizó el hipotético accidente no se percató del hecho y por eso prosiguió la marcha. Una variante de la misma hipótesis es que Rodríguez Barreto fuera succionado por las ruedas del camión o eventualmente de un remolque. En caso de que la conjetura del accidente sea la correcta, sí se tiene la convicción de que éste debió ser necesariamente protagonizado por un rodado de gran porte ya que en consideración al estado en que quedó el cuerpo, el conductor de cualquier vehículo liviano debió haber advertido lo sucedido. Pese a que la conjetura del accidente es considerada hasta el momento como la más firme, no se descarta ninguna otra hipótesis.
En primera instancia, tampoco se pudo determinar fehacientemente el motivo de la presencia de la víctima en ese lugar de la ruta y en condiciones meteorológicas tan adversas, así como también resultó imposible establecer el sitio y en la dirección en que se desplazaba, presumiblemente a pie, ya que, al menos al arribo de la Policía, no fue hallado otro vehículo que pudiera usar como medio de locomoción.

RUTA CORTADA
La minuciosa labor de Policía Técnica, el levantamiento del cadáver y demás actuaciones policiales determinaron que el tránsito por Ruta 3 no fuera liberado hasta próximo las 6 y 30 de la madrugada. Informada la Justicia de lo sucedido, dispuso el traslado de los restos de la víctima a la morgue judicial para la autopsia correspondiente y que prosiguieran las averiguaciones. En cumplimiento de la orden judicial, personal de la Seccional Cuarta practicó averiguaciones en las cercanías de la tragedia, que permitieron saber que Rodríguez Barreto había llegado a la zona con el propósito de obtener algún tipo de trabajo zafral, conocidos vulgarmente como “changas”. Pese a que a través de la cédula de identidad se pudo establecer que era oriundo de Progreso, pequeña localidad canaria ubicada al Sur de la capital departamental, se ignora cuanto tiempo hace que se encuentra ausente de su pueblo natal, así como también se desconocen los datos de sus familiares. En consecuencia, la labor de investigación policial se encuentra aún en pleno desarrollo.

INVESTIGACIÓN DEL MINISTERIO
En otro orden, la procedencia del llamado telefónico efectuado al servicio de emergencia policial 911 del Centro de Comando Unificado, con sede en Montevideo, para dar cuenta de lo sucedido no pudo ser establecida, ya que allí no todos los llamados telefónicos quedan registrados, a diferencia de la norma establecida para atender los llamados al 911 recepcionados en la Jefatura de Policía de Paysandú, en donde son chequeados constantemente los números de abonado de donde proceden todos los llamados de emergencia. Previo al llamado al servicio de 911 en Montevideo, hubo otros al que funciona en la Mesa Central de Operaciones de Jefatura de Policía de Paysandú y al menos uno de ellos no habría sido atendido por el operador de turno. Cumpliendo con el procedimiento de rigor, el jefe de Policía de Paysandú ordenó instruir la investigación correspondiente a efectos de determinar eventuales responsabilidades. La investigacion dispuesta por el jerarca se encuentra en la órbita del Ministerio del Interior, que tomó intervención en el asunto.

EL PRIMER MUERTO
Pese a que aún no se ha confirmado la hipótesis que sugiere que la muerte registrada en la madrugada anterior fue producto de un accidente de tránsito, el fallecimiento de Rodríguez Barreto es el primero que se registra en rutas en lo que va del presente año, configurando una situación totalmente opuesta a la registrada el año pasado.
El 2013 comenzó con un saldo de tres fallecidos: un peatón y dos motociclistas de 18 y 14, en tanto en en febrero de ese año, las víctimas fueron una motociclista de 29, un joven de 22 que viajaba como acompañante y otro motociclista de 14.