Opinion | 14 Feb En la víspera se conmemoró el Día Mundial de la Radio, determinado por la Unesco, tomando en cuenta que el 13 de febrero de 1946 la ONU inauguró la Radio de las Naciones Unidas. Hitos como la transmisión en vivo de la catástrofe del dirigible Hindenburg en 1937; del radioteatro “La Guerra de los Mundos” en 1938, pasando por la emoción de escuchar los partidos de fútbol de Uruguay en el Mundial de 1950, hasta en los radioteatros de ARAS, la radio ha dejado huella. Y hoy sigue siendo el medio principal, especialmente en comunidades pobres y rurales.
Aunque hoy hay varios otros medios de comunicación, la radio sigue siendo el medio por excelencia, ya que puede transmitir cualquier mensaje a cualquier lugar en cualquier momento. Es el medio que da voz a los sin voz, a los pobres, a las minorías o a las mujeres. El poder de la radio reside fundamentalmente en la capacidad de transmitir los hechos al mismo momento que ocurren. Y si bien eso hoy también lo pueden hacer otros medios -la CNN basó su crecimiento en su capacidad para transmitir por televisión en vivo hechos que cambiaron la historia del mundo-, la radio mantiene además el bajo costo de los equipos necesarios para la recepción. El surgimiento de las radios comunitarias, además, promueve mejoras en el acceso a la información, a la libertad de expresión y a la igualdad de género.
A diferencia de la web, la televisión y la prensa escrita, la radio acompaña a las personas en todos lados. Siempre informando las noticias del momento y siendo una poderosa arma para el pueblo. Al mismo tiempo, la radio se ha transformado en difusora de todos esos otros medios, a los que reproduce o en los que se basa para sus comentarios.
Por tanto, la radio es un formidable vehículo de integración e interactividad, permitiendo a través de la información, la participación de los ciudadanos, lo que a su vez sustenta el progreso de las sociedades libres y democráticas.
En Uruguay hay más de cien radios AM, alrededor de ciento cincuenta FM y un número no determinado de radios comunitarias. Sólo en Paysandú hay cuatro radios AM, seis radios FM y dos radios comunitarias.
El desafío de las radios en Uruguay es precisamente mantener su esencia, continuar siendo transmisora de la realidad al momento que ocurren los hechos. Transmitir en vivo debe seguir siendo el principal objetivo de las emisoras de radio, aun cuando las nuevas tecnologías permiten la operación remota. La radio sigue tan viva como antes, precisamente porque está allí donde transcurre la vida. Y puede transmitirla en ese instante.