Paysandú, Jueves 27 de Febrero de 2014
Locales | 25 Feb A los 90 años acaba de partir a realizar Llamadas en el cielo el gran pintor de la raza negra y sus rituales, como lo fuera en su momento Pedro Figari.
A esos núcleos de negros “refugiados” en algunas áreas olvidadas montevideanas que anualmente, desde enero, celebran su existir, fue que rescató en su esencialidad Páez Vilaró. Porque él convivió en esos conventillos, como el de Convención 1080. Así como el indio fue inmortalizado por el “Tabaré” de Zorrilla de San Martín, el gaucho en los cuadros de Juan Manuel Blanes, el negro quedará inmortalizado en los de Páez Vilaró.
Páez Vilaró realizó una obra importante de recreación y revalorización estética del folclore negro, afrouruguayo, en acuarelas y óleos caracterizados por su colorido, su dimensión, su buen humor. No son los negros tristes, sombríos, dramáticos de Figari. Los de Páez Vilaró trasuntan plenitud, jubiloso optimismo y un sentido pletórico de la vida. Páez Vilaró denuncia el brillo y el entusiasmo de su juventud eterna. La unidad de su pintura consiste en que pintaba exclusivamente temas afrouruguayos, retratando los colores que caracterizan a esa raza, en sus ropas, sus instrumentos, irradiando luminosidad por todos lados, bailes, tradiciones, fiestas. Su paleta ágil y rica, prefería las tonalidades cálidas y luminosas, las que confiere vitalidad singular a sus creaciones y un ritmo de euforia contagiosa. Comenzó pintando las vestimentas de los integrantes de comparsa en carnaval.
Dentro de la pintura uruguaya, la de Páez Vilaró es un creación personalísima cuyo gran mérito reside en dar categoría artística a temas populares.
José García Dantaz
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Feb / 2014
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com