Deportes | 15 Mar Hace pocos meses Sebastian Vettel se consagraba amo y señor de la Fórmula 1 actual al conseguir su cuarto título consecutivo. En aquella ocasión no fue sorpresa, porque el teutón de Red Bull comenzó la temporada como candidato, al punto que el año 2013 de la máxima categoría del automovilismo mundial no tuvo demasiadas sorpresas.
Pero este 2014 que se pone en marcha este fin de semana con el GP de Melborune, es otra historia. Si será, que el propio Vettel no solo no está pensando en el campeonato, sino en poder terminar esta primera carrera.
Es que los cambios registrados en el reglamento de la F1 terminó por darle a esta temporada que pone primera un sabor a terrible incertidumbre. Lo dejaron en claro las pruebas libres, en las que las principales escuderías terminaron teniendo serios problemas con sus bólidos al punto que hoy nadie puede considerarse favorito.
Los cambios han sido varios y apuntan a liquidar con la monotonía, con la supremacía de los de siempre. Más allá de cuál sea el resultado final de lo que para muchos es todo un experimento porque la F1 queda patas para arriba con respecto a la temporada anterior, la incertidumbre es enorme, el nerviosismo se vive hasta en los amantes de la categoría y las apuestas ahora también pasan por quiénes van a abandonar, situación que se vivirá repetidamente a lo largo del año. Esta madrugada, a las 3 de la mañana, se vivió la tanda de clasificación del GP de Melbourne, primera fecha del año, cuya carrera se vivirá la próxima madrugada, a la misma hora.
En la previa, a lo largo de las pruebas libres en el circuito, Lewis Hamilton y su Mercedes era considerado favorito. Habrá que ver qué sucede.