Locales | 25 Abr La ministra de Salud Pública estuvo en nuestro departamento, visitando el hospital de Guichón, donde también participó en un foro donde se presentaron trabajos de la comisión interinstitucional que atiende los casos de violencia doméstica. Aprovechó el viaje para conocer también el proceso del centro de atención médica en Orgoroso y la policlínica de Piedras Coloradas.
“Hace rato que debíamos esta visita, y por temas de agenda se había complicado” dijo la ministra, quien destacó el recibimiento de funcionarios y usuarios como “muy cálido”. Agregó que “estamos contentos de estar acá viendo las mejoras que se han implementado en el hospital y también las que quedan por hacer y ajustando algunas de las dificultades que pueda haber”. Sobre las cosas que quedan por hacer, detalló que “tenemos un plan nacional que se va bajando de acuerdo a las realidades locales de cada departamento. En Paysandú en el plan de accesibilidad del medio rural se está trabajando muy bien, hay una labor muy destacada de nuestro director Juan Gorosterrazú, quien trabaja mucho con el programa de salud rural y lo hacen todos los prestadores (Comepa y ASSE) muy comprometidos”.
En el caso específico del hospital de Guichón, dijo que “estamos viendo con la directora (Griselda Tealdi) algunas dificultades que están en vías de solucionarse, como por ejemplo las ecografías; otros temas que queremos hablar con el decano de la Facultad de Medicina por las dificultades con los títulos de licenciados en imagenología”.
Sobre el hospital de Guichón, consideró que “apuesta a una resolución de muy alto nivel, porque además funcionan los convenios de complementación (entre ASSE y Comepa) cosa que hay que decirla, porque en Paysandú eso está bastante avanzado en relación a otros lugares del país, y se viene caminando en la línea de lo que la reforma de la salud se ha trazado”.

TIEMPOS DE ESPERA Y PRIMER NIVEL DE ATENCIÓN
Consultada sobre la situación de los tiempos de espera para que un paciente pueda atenderse con el médico, la doctora Muñiz indicó que “estamos trabajando sobre los tiempos de espera, que son un problema que se da tanto en el sistema público como en el privado y tiene que ver con algunos temas, como que ahora todos tenemos acceso a los sistemas de salud -y el número de personas a atenderse aumentó- cosa que antes de la reforma no existía”.
De todas maneras, reconoció que “tenemos ciertos cuellos de botella, y además nosotros promovemos que la gente vaya a consultar no solamente cuando está enferma, sino cuando está en salud. Pero una de las cosas que percibimos en algunos lugares es que hay una excesiva derivación a los especialistas, y una excesiva autoderivación de los especialistas. Y nosotros promovemos los equipos de salud del primer nivel de atención, que están capacitados, y seguimos trabajando en su capacitación para que sean quienes pueden resolver muchos problemas”. Puso como ejemplo que “una persona por ser hipertensa no tiene que ir al cardiólogo, porque de lo único que se va a encargar es de la cifra de hipertensión y del corazón. La idea es que el médico general, el médico de medicina familiar y comunitaria y el equipo que existe tengan una visión integral y hagan la derivación correspondiente al cardiólogo cuando así lo requiere, pero también que reciban la referencia y sigan después a ese usuario”.

EL HOSPITAL DE QUEBRACHO
En el caso de Quebracho, que cuando sea declarado ciudad deberá tener un centro de salud más avanzado que la policlínica actual, la ministra dijo que “hay una Junta Departamental de Salud, con el director departamental que es nuestro ministro en territorio, que es quien la dirige y están todos los prestadores, los usuarios y los trabajadores, y en esas juntas se planifican las acciones en cada localidad, las necesidades y ajustes que requieran en cada lugar. Seguramente en esa junta se va a elaborar un proyecto y será presentado”.
Sobre la situación en que está la campaña de vacunación contra el virus del papiloma humano y si considera que tiene poca difusión con relación a otras campañas, como la del dengue, Muñiz consideró que “son cosas diferentes, porque con el dengue estamos todos en riesgo, toda la población y lo que tratamos de prevenir es que haya una epidemia con muchos casos. Son cosas distintas porque estamos hablando de medidas de salud pública que involucran a muchas personas y no a la individualidad”.

“PRIVILEGIAMOS LA EDUCACIÓN”
Aclaró sin embargo que “no significa que no nos preocupe la salud de las adolescentes y la prevención. Y el Ministerio ha hecho una campaña muy fuerte por la prevención del cáncer de cuello de útero”.
“El asunto es que nosotros no privilegiamos una herramienta sobre otras. Lo que privilegiamos es la educación, la promoción de salud como el Papanicolau. Y la vacuna previene contra una de las causas del cáncer de cuello de útero”.
“La más importante, la más prevalente, pero hoy no hay estudios en el mundo que digan que si una persona se vacuna contra el papiloma del virus no va a tener dentro de 30 o 40 años un cáncer de cuello de útero. Como eso no lo puedo afirmar, apunto las baterías a todas las herramientas”.