Opinion | 29 Abr En los últimos años el movimiento turístico ha crecido sustancialmente en Uruguay, tanto en lo que refiere a captación de turistas, aspecto en el que se ha llegado a cifras históricas, como en turismo interno.
Esto ha permitido a este sector de actividad convertirse en uno de los principales generadores de divisas para el país y empleo para los uruguayos. El embate de decisiones de países vecinos, como en el caso de Argentina, ha tenido consecuencias que afectaron la actividad aunque se trató de enfrentar la situación con distintos tipos de incentivos para que los argentinos --que son el principal contingente de turistas hacia Uruguay-- continuaran vacacionando en nuestro país. Hoy los números del Ministerio de Turismo indican que hubo una disminución del 3% en la cantidad de turistas argentinos que llegaron al país pero que, a su vez, se registró un aumento del 20% en el turismo brasileño, que es hacia donde se reforzará la promoción de Uruguay como destino.
Luego de una temporada que según los operadores turísticos fue mala y según el gobierno podría haber sido peor, el país registró una intensa actividad en todos sus destinos turísticos durante la Semana de Turismo. El turismo interno, genera no sólo en esta fecha, sino durante todo el año un movimiento nada despreciable, especialmente por lo que significa la ocupación de hotelería en temporada baja.
Durante la Reunión Abierta de la Cámara Uruguaya de Turismo realizada el pasado sábado en Paysandú fue presentado un estudio sobre precios de alojamientos turísticos en los países de la región en comparación con Uruguay, que permite concluir que básicamente no hay grandes diferencias para hoteles de la misma categoría. Sin embargo, se hizo un llamado de atención en cuanto a que se registran diferencias importantes en cuanto a los servicios que se brindan.
En otras palabras, en cuanto a precios el sector de alojamiento a turistas, Uruguay se encuentra en un nivel competitivo con los países de la región, pero esto no siempre va acompañado de un servicio de la calidad acorde a esos precios. Y cada vez más, ese es un aspecto que los turistas tienen en cuenta que es necesario atender rápidamente ante un mercado cada vez más exigente.