Locales | 06 May Hoy comenzó a regir la Ley 19.172 que regula el cultivo y mercado de la marihuana, al tiempo que en unos 15 o 20 días, se realizará un llamado a empresas privadas para obtener las licencias correspondientes al cultivo del cannabis y a fines de noviembre se habilitará la venta en farmacias.
Los controles de seguridad biológica como logística del cultivo correrá por cuenta de los productores, y no habrá subvención de ningún tipo por parte del Estado, sino que cobrará un canon, al tiempo que el producto se presentará en envases de hasta 10 gramos que deberán contener mensajes de advertencia para la salud. La ley crea el Instituto de Regulación y Control del Cannabis (Ircca), en cuyos laboratorios se realizará el control de calidad y los eventuales excedentes de producción quedarán a disposición de dicho instituto, que solicitará informes a la Secretaría Antilavado de Activos antes de entregar las licencias para evitar el tráfico ilegal. En una semana quedaría conformada la junta directiva del Ircca que será presidida por Julio Calzada e integrada por los ministerios de Ganadería, Agricultura y Pesca, de Salud Pública y de Desarrollo Social (Mides). El presidente de la Federación de Cannabicultores, Julio Rey, participó en diversos eventos de difusión del autocultivo con fines de su separación del mercado negro, uno de ellos organizado por Libera Paysandú, un grupo que propició las movilizaciones en favor de la ley a nivel local. “La gente es libre de optar si desea cultivar en su casa y utilizar el producto de esa cosecha en la medida que no afecte la vida de terceros, además de desmitificar algunos de los supuestos efectos negativos de la marihuana sobre el consumidor”, señaló a EL TELEGRAFO.
Rey explicó que “la federación está integrada por diversos grupos que acompañaron las movilizaciones que apoyaron la aprobación de la ley el pasado 10 de diciembre y actualmente tramitan la personería jurídica para incidir formalmente en la instrumentación de políticas sobre drogas. Tanto promocionamos el autocultivo como las técnicas y talleres de reducción de daños por parte de otros grupos que integran la federación y áreas de trabajo en diversos aspectos de la ley, como es el caso de un cultivo más extensivo para abastecer a las farmacias, mientras elaboramos proyectos para eso”.
El presidente de la Federación de Autocultivadores, señaló que además se estudia “la implementación del cáñamo, que es la variante industrial, no utilizada como psicotrópico. Ahí creemos que hay una posibilidad de desarrollo muy grande para pequeños productores o economías familiares como es el ejemplo de una cooperativa de cañeros en Artigas que está consultando para transformar su matriz productiva”. Rey señaló que esta instancia habilita a elevar el diálogo con distintos estamentos del estado como “Ancap, que se encuentra procesando biodiesel --ya que es uno de los posibles usos-- además de otros agentes en China porque este país es el principal mercado para la inserción de la producción de fibra de cáñamo orientada a un uso textil, que es una salida prácticamente inmediata”. El referente de los autocultivadores reconoció que “en Medicina comenzó ahora la discusión. En Florida se realizó una charla con la presencia de expertos de California sobre usos terapéuticos de la marihuana, con la posibilidad de instalar un instituto de investigación en Uruguay y a su vez una planta de extracción de aceite y se pondría en manos de pacientes oncológicos o epilépticos --entre otras graves enfermedades-- un remedio económico y muy efectivo. Dependerá incluso de lo que acepte o no formalmente el Ministerio de Salud Pública ya que se desarrollarán investigaciones para comprobar o no esos usos”. Rey reconoció que el Ircca no ha sido presentado formalmente, al tiempo que “recién este martes se comenzará a interpretar la ley. Sin dudas que habrá una flexibilidad y durante la semana se anunciarán los canales a utilizar para anotar a los cultivadores interesados, que se hará online”
Consultado en torno a la forma de adquirir semillas para el cultivo, Rey explicó que “deberán registrarse en el Instituto Nacional de Semillas (Inase) como semilleristas y en el registro que se denomina Cultivare, además de obtener la autorización final del Ircca, que formalmente no esá anunciado”.
La situación de los autocultivadores ya existentes es “un limbo legal”, según Rey, que apuntó a la redacción de la ley aprobada en diciembre pasado. “La norma dice que toda forma de hacerse con la semilla para autocultivo será lícita, en tanto, el decreto apunta al que vende e importa y también explica que los cultivadores habituales suelen cruzar especies para crear sus propias semillas que solo se permitirán para autocultivo”.
Rey señaló que el llamado para un cultivo extensivo orientado a la venta en farmacias se hará en unos 15 días aproximadamente, en tanto reconoció que se atraviesa por las “reglas de juego para un período de gracia y adaptación, además de dar tranquilidad a los cultivos que ya existen”.