Deportes | 31 May URUGUAY 1 IRLANDA DEL NORTE 0
Escenario: Estadio Centenario. Árbitros: Leandro Vuaden, Marcio Santiago y Kleber Lucio Gil (brasileños).
Uruguay: Fernando Muslera; Maximiliano Pereira, Diego Lugano, Sebastián Coates (45’ José María Giménez), Martín Cáceres (71’ Alvaro Pereira); Gastón Ramírez (64’ Nicolás Lodeiro), Walter Gargano (74’ Diego Pérez), Egidio Arévalo Ríos, Cristian Rodríguez; Diego Forlán (45’ Christian Stuani) y Edinson Cavani (64’ Abel Hernández). DT: Oscar Tabárez.
Irlanda del Norte: Roy Carroll, Corry Evans (8’ Conor McLaughlin), Christopher Baird, Luke McCullough, Aaron Hughes, Steven Davis, Oliver Norwood (85’ Jonathan Steele), Samuel Clingan (73’ Paul Paton), Shane Ferguson (80’ Daniel Lafferty), Niall McGinn (60’ Joshua Magennis), William McKay (80’ Ryan McLauglhlin). DT: Michael O’ Neill. Gol: 61’ Christian Stuani.
Amonestados: Walter Gargano (U); Oliver Norwood, Samuel Clingan (IDN).

Las 50 mil personas que llegaron al Estadio Centenario vieron al capitán Diego Lugano levantando la Copa Antel que estaba en juego, y festejaron como si fuera la Copa del Mundo.
Fue en realidad la demostración de cariño hacia la selección uruguaya pero, por sobre todo, la primera despedida de la Celeste antes del Mundial de Brasil.
Pero más allá de la importancia de la comunión de los futbolistas con la tribuna, de este triunfo 1 a 0 ante Irlanda del Norte, lo realmente importante pasa por las conclusiones del técnico de la Celeste, Oscar Tabárez.
Porque el maestro sigue sacándolas por partida doble, porque el lunes deberá definir qué dos jugadores quedan afuera del plantel y segundo, porque comienza a definir cuál es la idea que planteará este Uruguay que podría o no contar con Luis Suárez. Y, sin el goleador celeste, está claro que la historia a poner en la cancha es otra.
Anoche, Uruguay no tuvo demasiada sorpresa ante un rival que no obligó demasiado a Muslera, que tuvo apenas un par de incidencias.
El equipo que plasmó Tabárez en la cancha fue más que su rival, aunque tampoco tuvo momentos de descollo, y fue en el complemento cuando incentivó más a los hinchas.
A lo largo del primer tiempo contó con ocasiones de gol que se desperdiciaron. La mala definición fue lo que impidió que Uruguay se fuera en ventaja al descanso, aunque el golero rival evitó primero el grito de Cavani y en el rebote el de Forlán, con una gran reacción.
Lo mejor para los ojos estuvo en el complemento, cuando comenzaron a llegar los cambios. El “Cebolla” Rodríguez puso primera y en base a potencia y velocidad complicó a la visita, y pudo asociarse con los ingresados Lodeiro y Stuani, quien terminó por anotar el único gol celeste anticipando a uno de los defensas en el área.
La Celeste cumplió en este amistoso más allá de un resultado que pasa a segundo plano, y que bien pudo tener un par de goles más. Pero tuvo un balance positivo por varios aspectos pero, sobre todo, porque nadie salió lesionado a tan pocos días del debut mundialista. Atrás no hubo inconvenientes más allá de que el rival tampoco apuró, mientras que en el medio se robó el balón y se jugó con criterio.
Y adelante, está claro que sin Suárez la receta es otra, ya probada en varias ocasiones. Sin sorpresas, la Celeste comienza a afinar pensando en Brasil. Y pasó la primera prueba, aunque la “posta” la tiene el maestro.