Locales | 09 Jun El integrante del equipo de trabajadores en el directorio del Banco de Previsión Social (BPS), Ramón Ruiz, informó en la Mesa Departamental del Pit Cnt, el acuerdo que permite agilizar los intercambios de datos referentes a empresas y trabajadores entre el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y el Banco de Previsión Social (BPS)
El cumplimiento de la iniciativa que establece la última Ley de Rendición de Cuentas, “es uno de los cambios más importantes realizados a nivel institucional”, señaló Ruiz a EL TELEGRAFO.
En relación a los resultados verificados por acuerdos similares que mantiene con otros organismos, “constatamos que más de la mitad de las empleadas domésticas registradas en el BPS no contaban con un seguro de accidente y como la ley dice que los patrones tienen la obligación de asegurar a sus trabajadores por accidentes laborales, enviamos los datos de las empleadas que no estaban aseguradas y en un solo acto el Banco de Seguros del Estado (BSE) nos envió la factura para cobrar a la empleadora cuando vaya a pagar el BPS. De un total de 65.000 empleadas domésticas había solamente 28.000 que estaban aseguradas. Además el BPS cobra el seguro y lo transfiere al BSE en un mismo pago, en vez del trámite por separado que antes realizaba la empleadora”, agregó.
Según Ruiz, “el 85% de las empleadoras van a pagar menos que antes” debido al total de los registros. Además “con la DGI existen posibilidades de intercambio de información y se ha instalado un ventanilla única para que las empresas realicen los trámites en un solo lugar, o soliciten fiscalizaciones e inspecciones”, consignó.
Estos acuerdos permitirán que la información relativa a los trabajadores se sustente en un solo paso. “En vez de una planilla de trabajo y una historia laboral, se trata de un documento único que contenga la totalidad de los datos del trabajador y la empresa con una declaración nominada. Se comenzará a trabajar próximamente en este aspecto que facilitará las gestiones de las empresas y los controles pertinentes”, dijo Ruiz.
Explicó que “cuando el MTSS reciba la denuncia de un trabajador, le dará curso con los datos que cuentan ambos organismos para evitar lo que ocurría con algunas empresas que hacían declaraciones diferentes. Por ejemplo, el BPS no sabe lo que gana una persona de acuerdo al convenio porque este documento se redacta y se acuerda en el ministerio”.
Ruiz reconoció que “hay empresarios nerviosos con este convenio”, en tanto “comenzaron a plantear algunos reparos. Aquellos que hacen las cosas bien serán beneficiados porque la tramitación resultará sencilla para mejorar la gestión en el BPS y el ministerio”.
Por otro lado, aseguró que “de esta forma se rompen las ‘chacras’ y todos pasamos a manejar la misma información”, además de avanzar “hacia una reforma del Estado que no se concretará en un único acto y bajo una ley, sino en estas medidas como ocurrió con las trabajadoras domésticas y ahora con el MTSS”.
El integrante del equipo del BPS sostuvo que esta herramienta “aumentará la formalización, combatirá la informalidad y la subdeclaración, además del respeto a la normativa vigente y el cumplimiento de laudos”.
Ante la constatación de inconsistencias en los datos entre ambos organismos, Ruiz puntualizó que “se dará vista a la empresa ante la posibilidad de un error de digitación que se aclarará. Sin embargo, si se comprueba una situación de irregularidad o incumplimiento de normas o convenios, la empresa deberá regularizar y si es necesario pagará lo que corresponda”. Si es un atraso en el BPS, “deberá abonar multas y recargos, además de corregir la historia laboral del trabajador en cuestión, al igual que la regularización que exigirá el ministerio ante la posibilidad de incumplimiento de laudos y convenios”. Ruiz señaló que este acuerdo funcionará con la utilización de la herramienta. “El BPS no se dará cuenta automáticamente de una irregularidad porque tenemos 1.450.000 trabajadores registrados y no podemos ver si todos los meses hay cambios en sus condiciones. Requiere que los trabajadores se mantengan atentos y denuncien la necesidad de realizar controles durante las negociaciones colectivas”, añadió.
No obstante, reconoció que “no será fácil porque todas las estructuras del Estado estaban pensadas para que cada uno funcione en compartimentos estancos, o sea, cada uno tenía su ‘chacra’ y se resolvía de forma parecida pero en estadios distintos”, concluyó.