Deportes | 28 Jun Después de 64 años, el brasileño Joedir Belmont tendrá la posibilidad de ver una final del Mundial y nada menos que en su tierra.
El hincha verdeamarillo, de 85 años, se quedó con las ganas (aunque seguramente lo habrá agradecido después del resultado) de presenciar la gran final del Mundial de 1950, que Uruguay le ganara a Brasil por 2 a 1 en Maracaná.
Tras haber comprado el boleto y esperar con ansiedad el momento de ir a Maracaná, la enfermedad de su madre le impidió poder utilizarlo para ver la partido.
Belmont guardó la entrada como recuerdo, y antes de la disputa del Mundial 2014 se comunicó con la FIFA mediante una carta en la que anunció que donaría la entrada de la final de 1950 para el museo que abriría el próximo año el organismo que rige los destinos del fútbol mundial, aunque a cambio de una entrada para ver la final del Mundial 2014, soñando con ver a su Brasil campeón.
Ayer, en Maracaná, el vice de la FIFA recibió de manos de Belmont el preciado tesoro, y a cambio brindó tres entradas para la gran final que se disputará el próximo 13 de julio en ese mismo escenario.
El hincha brasileño sueña con el título y el estar presente en la finalísima, para “que de una vez por todas se olviden de aquel 2 a 1” que se concretara en la gesta de la selección uruguaya en 1950.