Deportes | 07 Jul A Luis Suárez, que podía pintar, lo rajaron antes; al colombiano James Rodríguez, que en base a goles quería y estaba para pelearla, lo sacó Brasil; a Neymar, un candidato, lo tiró para afuera un colombiano. Por eso, cada vez son menos los candidatos a transformarse en mejor jugador del Mundial de Brasil.
Todas las miradas están, teniendo en cuenta los candidatos, en dos que tienen chances y que se medirán el miércoles en una de las semifinales: el argentino Lionel Messi y el holandés Arjen Robben.
Messi llegará a este compromiso con cuatro goles marcados y una asistencia, mientras que para el holandés fueron tres los festejos y un pase de gol.
Pero, más allá de esos números, está claro que ambos han sido decisivos en sus respectivos equipos.
Con 27 años, el cuatro veces ganador del Balón de Oro (2009, 2010, 2011 y 2012), el argentino tiene todo para consagrarse a nivel personal en esta cita mundialista, más allá de que hasta el momento solo ha dado algunas muestras de su calidad, pero que han resultado fundamentales para su selección.
Arjen Robben, de 30 años y actual subcampeón del mundo, es otro que viene siendo importante para el rendimiento holandés, en base a sus piques endiablados. El delantero es el sexto mejor del Mundial, según la FIFA, que le otorga un 9,59 puntos, mejor que los 9,41 de Messi en base a su rendimiento. Pero, más allá de eso, los dos son grandes candidatos a llevarse el galardón de mejor jugador del Mundial.