Locales | 08 Jul Durante la sesión especial de la Junta Departamental recordando del 27 de junio de 1973, en representación del Partido Colorado el edil Álvaro Alza recordó “las palabras del Comité Ejecutivo” de su partido “que en aquella oscura época de la República, mencionaba que ‘la sola condición de batllistas nos exime de pronunciarnos acerca de estos hechos que, queda claro, reprueba este Comité’. Asimismo exhortaba a todos los batllistas a estar en permanente vigilancia y atentos hasta que la normalidad volviera a las instituciones democráticas de nuestro país y también proclamaba que ‘ningún ciudadano batllista podría ocupar cargo alguno en el gobierno que se iniciaba”. Alza sostuvo, “en lo que nos es personal en esta fecha es oportuno renovar nuestra confianza en la libertad de los seres humanos y en la democracia como única forma de gobierno que puede garantizar los derechos de los ciudadanos. Queremos también remarcar nuestra absoluta convicción que para todo ello es condición necesaria el respeto del Estado de Derecho, entendido como aquel sistema en que los gobernantes se someten plenamente al orden jurídico vigente en nuestro país, a la Constitución y a la ley, como las máximas expresiones del pueblo soberano y representado en el Parlamento”.
Dijo el edil que “para renovar la señalada confianza es imprescindible vigilar a todo el sistema político, pero fundamentalmente a quienes tienen la alta responsabilidad de gobernar. Es propicia entonces la ocasión para seguir remarcando que jamás debemos alentar o dejar pasar acciones que se justifiquen en la circunstancia de que lo político puede primar sobre lo jurídico. Su caso más extremo ya lo conocemos y son, justamente, los gobiernos de facto o dictaduras pero hay que cuidar también las políticas aisladas que tienden a generar mella en el sistema”.
“Siendo entonces la dictadura un sistema de gobierno donde el orden jurídico y constitucional pierde absoluta vigencia debemos revalorizar en forma continua la trascendencia y el respeto de nuestra máxima norma jurídica, pues ella consagra los derechos fundamentales de quienes vivimos en una sociedad. ¡Que viva la libertad y salud a la democracia!”, culminó.