Locales | 05 Jul Aun con el “agua al cuello” los vecinos de la zona suroeste de la ciudad, junto al río Uruguay se resistían anoche a evacuar sus hogares, pese a las advertencias del Comité Departamental de Emergencias, que recorrió la zona con camiones y personal, dispuestos a retirar a los vecinos antes que llegue la inundación. Anoche el Uruguay estaba a 5,53 metros (a la medianoche), estimándose que entre las 3 y las 4 de la madrugada llegaría al nivel bisagra de 5,60 metros por sobre el cero del puerto local, lo que dispararía las evacuaciones, debido al ingreso del agua a los hogares más cercanos al río.
Anoche solamente catorce personas (ocho mayores y seis menores) habían aceptado ser evacuados. Estos primeros evacuados (se considera tales a quienes son asistidos con residencia, alimentación, atención sanitaria y vestimenta) fueron llevados al estadio “8 de Junio” -cuatro mujeres y seis menores- y a una carpa junto al predio deportivo del Paysandú Wanderers -cuatro hombres-.
En tanto, los autoevacuados (se considera tales a quienes por sus propios medios o requiriendo la asistencia del Comité se mudan a casas de familiares, amigos o alquileres temporales), suman 112, de los cuales 77 mayores y 35 menores.
El presidente del Comité Departamental de Emergencias, Emilio Roque Pérez, dijo que en la víspera “integrantes del Comité Departamental de Emergencias recorrimos la zona comprendida entre 25 de Mayo, avenida San Martín, Ledesma y al Oeste, informando con claridad a todos los vecinos de la inminencia de la inundación; ahora sí, no hay dudas, el río llega al nivel de evacuación. Pero, lamentablemente, la mayoría se negó a abandonar sus hogares”.
“Comprendemos el apego a sus pertenencias, pero es sabido que el comité ha tenido en cuenta ese extremo, contando con un depósito en el Club Rodó. Y tenemos lugares disponibles para alojamiento. Sabemos que no son ideales, pero estamos ante una emergencia y cuando el agua llega, no hay muchas opciones”, agregó. La altura del lago de la represa de Salto Grande se ubicaba al anochecer de la víspera en 29,96 metros, lo que significa un aumento respecto a la jornada del jueves (29,31 metros) de sesenta y cinco centímetros.
Asimismo, volvió a aumentar el desembalse, llegando en la víspera a 21.200 metros cúbicos por segundo. Hoy sábado continuará aumentando, a 22.000 metros cúbicos por segundo. El aporte que Salto Grande recibió hasta ayer fue de 18.794 metros cúbicos, unos 3.500 metros cúbicos por segundo más que el jueves (15.268 metros cúbicos por segundo).

ALERTA NARANJA
El Instituto Uruguayo de Meteorología emitió una alerta de color naranja, que estará vigente hasta las 22 horas. En los departamentos de Artigas, Salto, Paysandú, Rivera, Tacuarembó, Durazno, Cerro Largo, Treinta y Tres, pronostica precipitaciones copiosas y tormentas fuertes.
La probabilidad es alta, y los fenómenos se producirían debido al desplazamiento y posterior profundización de una depresión atmosférica frontal sobre nuestro país. Eso provocaría precipitaciones copiosas (entre 50 y 100 mm en 6 horas, o entre 100 y 200 mm en 24 horas), actividad eléctrica, probables granizadas y ocasionales rachas de viento asociadas a tormentas de entre 75 y 90 km/h de dirección SW.
En tanto para los departamentos de Río Negro, Soriano, Colonia, Flores, San José, Florida, Canelones, Montevideo, Lavalleja, Maldonado y Rocha se emitió un nivel de riesgo meteorológico amarillo, previéndose precipitaciones abundantes (entre 20 y 50 mm en 6 horas, o entre 50 y 100 mm en 24 horas), y tormentas puntualmente intensas (con rachas de viento entre 60 y 75 km/h, actividad eléctrica y probables granizadas).
Fuentes del Comité Departamental de Emergencias indicaron que la ocurrencia de lluvias y vientos haría especialmente dificultosa la evacuación de familias inundadas, pero que no necesariamente aportaría volumen a la inundación, en la medida que es necesario tener en cuenta el nivel del río aguas abajo, y el hecho de que para los departamentos de Río Negro, Soriano y Colonia, la alerta es de color amarillo, lo que podría reducir el impacto de copiosas lluvias sobre Paysandú.

ABUNDANTES LLUVIAS EN SUR DE BRASIL
Lo que sí preocupa es la situación en el sur de Brasil, Paraguay y Norte argentino. Las lluvias torrenciales que asolan el sur de Brasil en los últimos días, fundamentalmente en el estado de Río Grande del Sur (fronterizo con Argentina), han dejado sin hogar a unas 15.600 personas y han causado la muerte de otras dos.
Según el último informe de Defensa Civil de Brasil, hasta ahora 115 municipios han sido afectados por las lluvias, de los cuales 67 han decretado estado de emergencia y dos de ellos de calamidad pública.
Entre las ciudades afectadas se encuentra la capital del estado, Porto Alegre, una de las 12 sedes del Mundial de Fútbol, donde en diez horas llovió el equivalente al 75% del promedio del mes de junio, según el Instituto Nacional de Meteorología (Inmet), de Brasil.
Sin embargo, las peores situaciones se vieron en el interior del estado, donde hasta ahora las autoridades han confirmado la muerte de dos personas y continúa la búsqueda de una mujer de 56 años que está desaparecida. En el municipio de Itaqui, frontera Argentina, los vecinos que se han visto obligados a abandonar sus casas han tenido que volver para hacer guardia y de este modo evitar los saqueos que comenzaron a multiplicarse. Según denunciaron algunos de estos vecinos a los medios locales, muchos de los saqueadores provenían de localidades vecinas en Argentina.
En Río de Janeiro, donde ayer se disputó el partido de cuartos de final entre Alemania y Francia, las inclemencias meteorológicas obligaron a cerrar el aeropuerto Santos Dumont, de uso exclusivo para vuelos domésticos, durante 3 horas y media, así como desplazar 17 vuelos para el aeropuerto internacional Tom Jobim.

EVACUACIONES EN COLÓN
En la víspera, con la altura del río Uruguay en 6,42 y creciendo, comenzaron las evacuaciones en la ciudad de Colón, a través del municipio de esa ciudad, concretamente de la Secretaría de Políticas Sociales. Los primeros evacuados residían en el barrio Juan Domingo Perón.
En tanto, las autoridades se preparan para el traslado definitivo de las familias beneficiadas para el Plan conocido como de las 40 Viviendas, las que se encuentran viviendo en condiciones de extrema vulnerabilidad debido al avance de las aguas. “Esta situación se da en Colón debido a que inescrupulosos permitieron que personas construyan en esta zona baja de la ciudad. Con estas acciones empezamos no solamente a urbanizar, sino a modificar significativamente el estilo de vida de estas familias”, dijo el intendente de esa localidad, Mariano Rebord. Serán trasladadas a nuevas edificaciones en el barrio San Francisco, en el marco del denominado Programa Federal de Viviendas y Mejoramiento del Hábitat de Pueblos Originarios y Rurales, el cual es para familias que viven en extrema vulnerabilidad, en condiciones insalubres. Se aplicará precisamente a esas familias que hoy tienen viviendas construidas bajo la cota mínima de construcción. En total, son nueve familias.