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Paysandú, Miércoles 30 de Julio de 2014

Cuando el problema somos nosotros

Opinion | 24 Jul Cuando leemos las estadísticas sobre siniestralidad en el tránsito solemos verlas como simples números o una cuestión relativamente lejana de nuestra circunstancia actual. Sin embargo, todos estamos expuestos en cualquier momento a sufrir un accidente de tránsito y alcanza para ello con sólo circular por la vía pública.
Evidentemente no se trata de fatalidad, sino que el problema somos nosotros mismos puesto que está demostrado que los errores humanos son las principales causas por las que se producen accidentes viales.
Un estudio realizado por la empresa Radar para Unasev en base a datos recogidos en 45 sitios urbanos de todo el país muestra que se registra un incremento en el uso de elementos de seguridad en el tránsito, aunque aún falta mejorar en la conducción de vehículos, cambiar conductas negativas de la población y reducir las diferencias que se constatan en los distintos departamentos.
En ese marco, se analizó el uso en conductores del cinturón de seguridad, el sistema de retención infantil (SRI), luces y la utilización de teléfonos celulares en marcha, agregándose el control del uso de casco y vestimenta de alta visibilidad en motociclistas.
Según los datos del estudio, el comportamiento del conductor condiciona la conducta del resto de los pasajeros del vehículo. Es decir que en el caso del uso del cinturón de seguridad, por ejemplo, en 88,3% de las observaciones se verificó que todos los ocupantes del vehículo utilizaban este implemento de seguridad. Las mujeres usan más el cinturón de seguridad que los hombres y hay un mayor uso en zonas céntricas y días hábiles, cuando se prevé que haya más controles de la normativa vigente.
En cuanto a los niños, es muy bajo (28%) el uso del sistema de retención infantil (SRI) y de ellos el 20% estaba ubicado en el asiento delantero. El mejor desempeño de mujeres en cuanto a implementos de seguridad no incluye el uso de celular, y conducir hablando por celular es una conducta que aumenta entre las mujeres y los conductores jóvenes.
Respecto a los motociclistas el aumento del uso del casco es alentador (83%) pero sigue siendo un problema la circulación con más de dos pasajeros, lo cual está prohibido. En definitiva, la adopción de hábitos saludables en materia de seguridad en el tránsito es un tema cultural y constituye un proceso lento del cual están viéndose algunas señales alentadoras. No obstante, la negligencia, distracción, cansancio o incumplimiento de las normas de tránsito tanto de los conductores como el resto de los actores del tránsito no sólo son temas con los que aún debemos luchar sino también las causas más frecuentes de accidentes.


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