Rurales | 16 Ago TRINIDAD, Flores (Por Pablo Blanc). Las instalaciones de la Unión Rural de Flores (URF) fue el lugar elegido este año para inaugurar la presente zafra ovina, con la presencia de algo más de 200 personas, la del subsecretario del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech y representantes del sector que reconocieron las expectativas para este año, pero también efectuaron reclamos ante dificultades que atraviesa el sector.
Con el cambio de “zafra ovina” desde el año pasado, y no “zafra lanera” como era hasta entonces, la jornada involucró a los dos principales productos que “nos otorga nuestra apreciada oveja: lana y carne”, dijo en su alocución el licenciado Joaquín Martinicorena, presidente del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL).
Al corte de cinta siguió una disfrutable demostración de Fredy Romero, empresario de la carne capitalino que en pocos minutos realizó una interesante cantidad de cortes directamente desde una red colgada en el gancho, demostrando todo lo que se puede obtener de un ovino, incluyendo chorizos (con queso y morrón), asado relleno con queso, panceta y morrón, diversidad de chuletas y hasta milanesas.
Posteriormente, el equipo de esquila y acondicionamiento del SUL realizó “simbólicamente” la esquila de algunas borregas Merilin. Previamente, la URF realizó una exhibición práctica de una nueva máquina importada, que permite hacer el descole y limpieza rápidamente, dejando al animal en forma invertida (patas arriba) para un trabajo cómodo del operario.
A la tradicional inauguración de la esquila, se suma este año el arranque de la zafra de faena de cordero pesado, donde actualmente se procesa más de 925.000 corderos por ejercicio con destino a 40 mercados e ingresos que superan los 108 millones de dólares. El titular de la gremial señaló que “la oveja, noble animal, ha permitido el ingreso de U$S 400 millones a nuestro país en el ejercicio agrícola culminado el 30 de junio”, reconociendo “la importancia estratégica de los ovinos para el país y su economía”, a través de la exportación. Consideró que actualmente para el rubro se abre una excelente oportunidad “para el engorde de corderos en los llamados ‘Puentes Verdes’ que suman casi 400.000 hectáreas, debido a las exigencias de los Planes de Uso y Manejo de Suelos”.
Adelantó que el Plan Estratégico Nacional para el Rubro Ovino (Penro) finaliza en 2015 “y ya nos estamos reuniendo y trabajando para realizar el nuevo Plan hacia la Ovinocultura de 2020”. Señaló que se debe “continuar apostando a la capacitación, donde consideramos muy importante el apoyo del Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop), desde el año 2011”. Este año se aspira a llegar a más de 1.000 personas, que se capacitarán en más de 60 cursos.
Martinicorena expresó que para este año se continúa realizando el Plan Piloto de Grifa Celeste Acreditada para continuar apostando a la calidad de la cosecha de lana, apuntando principalmente a las zonas en donde no se consiguen máquinas acreditadas Grifa Verde.

ABIGATEO
Las dificultades que existen por el abigeato y los animales domésticos sin responsables, que se vuelven salvajes y actúan como predadores, fue tema de preocupación, siendo citado por Martinicorena, pero también por Alejandro Nin, en representación del Penro y Central Lanera Uruguaya (CLU).
El presidente del SUL solicitó a las intendencias que actúen con más fuerza en el tema abigeato y “a través de sus áreas de bromatología, participen con más fuerza en la Comisión Honoraria de Seguridad Rural, controlando las bocas de expendio, al estar la salud de las personas de por medio”.
Al tiempo que reiteró “la colaboración con sus técnicos en el funcionamiento de las comisiones de Seguridad Rural departamentales”, manifestó su preocupación porque aún no se ha podido resolver y quedará para el año próximo con una nueva legislatura, un proyecto de modificaciones a la ley que ayudará a enfrentar el problema de la seguridad rural”.

MERCADOS
Mencionó los mercados para la producción ovina, y en especial para quienes producen lanas de calidad para ser usada en vestimenta y tapicería, en donde Central Lanera Uruguaya integra un “selecto grupo”. Destacó la importancia del mercado norteño de Brasil para la carne ovina, y como segundo lugar el ingreso de China en lugar de la Unión Europea. Paralelamente, dijo que “hemos logrado el ingreso a los Estados Unidos con carne deshuesada en el pasado mes de noviembre.
Aprovechó la oportunidad para reiterar la importancia del “Compartimento Ovino” en el Centro de Investigación y Desarrollo Alejandro Gallinal” (Ciedag), que permitirá el ingreso de la carne ovina con hueso a mercados selectos.

NUBES EN EL HORIZONTE
Nin, por su parte, sostuvo durante la inauguración de la zafra ovina, que “el panorama no está despejado en la industria lanera” para el rubro ovino “y visualizamos algunas nubes en el horizonte”. “Hemos perdido competitividad en forma paulatina durante muchos años por la caída del tipo de cambio real. Si bien el dólar ha subido en algo su cotización en las últimas semanas, la suba no logra compensar las pérdidas acumuladas de competitividad, teniendo en cuenta además, que no se ha logrado bajar los índices de inflación”, señaló.
Acotó que “sufrimos un aumento generalizado de las tarifas públicas, lo que se ve agravado si lo medimos en dólares”. “Seguimos aportando en la lana la tasa de Imeba más alta vigente (2,5%). Nuestros costos salariales también han crecido en forma importante, en las barracas, lavaderos, peinadurías y frigoríficos medidos en dólares, fruto de los aumentos salariales resueltos por los Consejos de Salarios, la reinstauración de los aportes patronales a la industria exportadora y la duplicación de los aportes patronales al Fonasa”, dijo.
Puntualizó que estos aumentos de costos “han empujado también a una suba generalizada de los fletes internos en dólares, que impacta fuertemente en el transporte de animales para faena y de la lana hasta los centros de acopio y barracas”. Dijo que “hoy llevar un camión de lana desde Artigas a Montevideo cuesta cinco veces más que llevar esa misma lana de Montevideo a China”, enfatizando que “¡ese es el nivel de costos internos que hoy tenemos!”.
Agregó que en el último año “se eliminaron los beneficios de prefinanciación de exportaciones sustituyéndose por un aumento del 1% en la devolución de impuestos, lo que significa para el sector topista la mitad de lo perdido, afectando claramente al agregado de valor en las cadenas”. Definió que “cada vez nos cuesta más exportar el trabajo y agregado valor nacional”.

PROPUESTA
Explicó que se han hecho “reiterados planteos al Poder Ejecutivo, advirtiendo de la situación que vive el sector lanero y en especial el topista”, y las empresas realizaron algunas propuestas: “Bajar en forma importante la tasa de Imeba que aporta la lana. Exonerar de Imeba a las lanas grifa verde, como política de estímulo a la certificación de calidad en los procesos, además de aumentar del 3 al 6 por ciento la devolución de impuestos indirectos de las exportaciones de tops de lana, devolviendo así la competitividad perdida en los últimos años”.
Citó que la gran mayoría de los países que tienen peinadurías de lana protegen sus industrias, por lo que proponen “poner al menos en igualdad de condiciones a nuestra industria, para que pueda seguir compitiendo por los mejores mercados”.