José Luis Dalmao

Deportes | 22 Ago El entrenador de la selección Sub 15 de Guichón, José Luis Dalmao, dialogó con EL TELEGRAFO sobre la realidad del fútbol en la segunda capital del departamento. Para el director técnico “hasta que no tengamos chiquilines que compitan en Paysandú, por el momento el incentivo que tienen es la selección. Nuestro problema es que no tenemos mucho apoyo y hacemos todo a pulmón. No es mucha gente la que se arrima y en ese sentido tenemos carencias, tenemos deficiencias físicas porque no tenemos muchos preparadores físicos que colaboren con la selección”.
“Hacemos lo que podemos, intentamos competir de la mejor manera y este año nos hemos preparado un poco mejor que en la pasada temporada”, agregó. “En el campeonato pasado el cuarto partido que tuvimos fue cuando jugamos en el Estadio Artigas con Paysandú por la Copa y fue cuando mejor lo hicimos, pero ya era la finalización del torneo”. Sin embargo en esta temporada, la “rojita” jugó su tercer partido de práctica ante la Blanca chica, por lo que este año “arrancamos con un poco más de rodaje, por lo que esperamos que nos vaya mejor”. En lo que refiere a las carencias que mencionó, Dalmao expresó que “los padres no se arriman mucho, pero esto pasa siempre porque en una reunión del liceo o de la escuela, que me ha pasado, hay reuniones de padres que van cinco, y el fútbol no escapa a esta realidad.
Así es imposible, sin el apoyo de los padres los chiquilines no pueden tener una disciplina deportiva y eso nos está faltando, porque si no viene el empuje de la casa es imposible trabajar. Nosotros intentamos hacerlo en esa hora de entrenamiento, pero es como la maestra, ¿cómo cambia la mentalidad sin el apoyo de la casa?”. “Hoy día los chiquilines están interesados en otras cosas como por ejemplo la computadora.
Y contra eso es que luchamos constantemente, incluso en mi casa, porque hasta tienen problemas de columna porque pasan horas sentados detrás de una computadora y juegan a los jueguitos utilizando los dedos, mientras que en la cancha lo deben hacer con los pies”.
“Ellos te hacen todos los goles en la computadora, pero luego la realidad es en lo físico y por eso es una lucha permanente para motivarlos para llevarlos al deporte”, agregó.