Rurales | 20 Sep El actual escenario de precios internacionales de soja indica que los productores tendrán que atravesar una difícil zafra 2014/15 que, de no cambiar la coyuntura actual de precios, será marcada por márgenes económicos negativos.
Así fue presentado por el ingeniero César Mosca, integrante de la Federación Uruguaya de Grupos CREA (Fucrea), en la ciudad de Mercedes, departamento de Soriano, durante la Jornada de Cultivos de Verano.
El asesor argumentó que aunque los rendimientos para la próxima zafra mejorarán --ya que se espera un año Niño, cuando históricamente los rendimientos de sojas de primera mejoran alrededor de 600 kilos por hectárea--, los costos de producción no acompañan la baja del precio de la oleaginosa.
En ese sentido indicó que con los precios actuales de soja, U$S 360 por tonelada, y un rendimiento de 2.900 kilos por hectárea, luego de procesar todos los costos el margen para los productores sería negativo, de 26 U$S por hectárea. Con el mismo escenario la soja de segunda tendría saldo cero, no por mejora de rendimiento ni precio, sino por compartir el costo de la renta con otro cultivo. En el caso de las otras alternativas que Mosca manejó –sostiene un informe de Tardáguila Agromercados--, como maíz de primera y sorgo de primera, el saldo sería negativo para ambos. El maíz dejaría un rojo de U$S 170 por hectárea y el sorgo U$S 184 por hectárea.
También fueron presentados los rendimientos de equilibrios para el escenario actual de precios y para las distintas zonas del país. El litoral sur debería tener un rendimiento de 2.980 kilos por ha, el centro 2.617, el litoral norte 3.039, la zona noreste 2.576 y la zona sureste 2.448 kilos por hectárea.
No obstante, Mosca expresó que los propietarios de tierra y maquinaria podrían ser la excepción, ya que si se cuenta con el capital tierra y la maquinaria los resultados varían notablemente.
El productor que posee maquinaria podría generar una rentabilidad sobre los costos totales de 15%, es decir un margen de U$S 133 por ha; mientras que el productor que sea propietario de la maquinaria más la tierra podría traducir esa rentabilidad en 89%, a U$S 493. “Con esto no quiero decir que hay que salir a comprar maquinaria”, aclaró el especialista. También detalló la incidencia que tienen los costos y la distribución de lo producido.

CONCLUSIONES
A modo de conclusiones, Mosca planteó que el desafío para este año es hacer soja pero no en todos lados sino donde sea realmente rentable, apuntando a una mayor eficiencia de esos lugares. “La soja sigue siendo el motor de la agricultura ya que si pensamos solo en los márgenes no hay alternativas”, dijo.
Además, confesó que desde su punto de vista hay que replantear el tema de las rotaciones y capitalizar más los rendimientos del maíz y del sorgo. “Será un año complicado que de prolongarse veremos cambios estructurales en los sistemas productivos”, concluyó.