Locales | 23 Sep Desde el mes de agosto, unas veinte personas –integradas en cuatro familias y un adulto mayor-- continúan evacuadas y sin hogar, pese a las gestiones llevadas adelante por el Comité Departamental de Emergencia.
El 7 de agosto el intendente Bertil Bentos había sido recibido por el presidente del Sistema Nacional de Emergencias (Sinae) y prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa. En ese encuentro el jefe comunal hizo entrega de un planteo formal del Comité Departamental de Emergencia ante la situación de calle en la que habían quedado varias personas tras el retiro de las aguas del río Uruguay en la costa de nuestra ciudad.
El planteo hacía especial hincapié en el problema que significaba la “falta de tierras, si queremos darle una solución definitiva, lejos del lugar donde tenían sus viviendas precarias, hechas con madera, cartonplast y nylon”, señalaba Bentos en ese momento a EL TELEGRAFO, justificando la solicitud de apoyo “con un terreno donde podamos apoyar a estas familias para que construyan una situación habitacional definitiva”.
Un mes y medio después de esta reunión la situación de las personas a las que aludía el intendente se encuentra incambiada, según indicó el secretario del Comité Departamental de Emergencia, Emilio Roque Pérez. Son cuatro familias y un adulto mayor, algo más de 20 personas que se quedaron sin casa.
Pérez hizo referencia a esa reunión con Cánepa una vez finalizada la situación de emergencia por la inundación.
“Estuvieron hablando entre ellos y (la Dirección de) Obras le mandó a los ministerios de Vivienda y de Transportes, y con copia a Cánepa, a través de la Intendencia, todas las tierras, todos los terrenos de los entes públicos y hasta ahora no se ha tenido ninguna contestación, y ahí estamos, esperando”, indicó.
ALOJAMIENTO Y COMIDA
El secretario enfatizó en que estas personas van a continuar al amparo de la Comuna “mientras no se consiga tierra como para hacerle algo más digno que donde estaban viviendo, porque no tienen nada, estaban viviendo en la costa de río, con chapas, costaneras, que se las llevó todas la corriente”. Tres de las familias están alojadas en el Estadio Cerrado 8 de Junio y una familia y un adulto mayor están en el parque Cairo Cosio.
“La Intendencia les sigue dando el desayuno, el Batallón el almuerzo, la merienda la Intendencia y la cena el Batallón. Todo eso lo compra la Intendencia, y se lo va a pagar el INDA. El INDA va a devolver con plata, algún día”, agregó.
Consultado respecto a en qué plazo podría remediarse este asunto, Pérez insistió en que “mientras no se consiga tierra y no haya dónde ubicar a esa gente, irá para largo”.
Los terrenos que se vayan a emplear para solucionar la situación de estas familias deben reunir algunas condiciones, por ejemplo que cuenten con los servicios de energía eléctrica, agua potable y saneamiento.
Entre los padrones que se identificaron en la lista que se envió al Sinae hay de varios organismos estatales y especialmente algunos pertenecientes al Ministerio de Defensa Nacional, según comentó en su oportunidad del intendente Bentos.