Sergio Esquivel

Deportes | 31 Oct “Con el paso de los días es como que todo se disfruta más, y se toma conciencia de lo que se logró”, dijo Sergio Esquivel mientras miraba ayer un partido de fútbol infantil en cancha de Independencia, haciendo alusión al histórico título que logró 18 de Julio, al que dirige.
Los días han pasado, pero lo que quedará escrito en páginas históricas es que el equipo de Porvenir, en su segundo año en la Primera División del fútbol sanducero, y en su tercera temporada en el ámbito de la Liga, supo llegar a lo más alto, cuando quizás pocos podían soñarlo.
“Hay una realidad, y creo que era impensado el ganar los dos campeonatos, aunque el sueño de Ayende (el presidente) era justamente ese. El objetivo principal era no descender, pero se fue presentando la otra posibilidad de a poco y llegamos a cerrar un campeonato antes de lo esperado. Obviamente que uno se siente contento, y hay que agradecerle a los jugadores, porque si bien muchas veces estaban complicados para poder viajar a entrenar, cumplían los domingos y, por lo tanto, hay que reconocer que hicieron las cosas bien. El fútbol de Paysandú está complicado económicamente, y es algo lógico que el jugador deba pensar primero en cuidar su trabajo”, afirmó el entrenador.
Para Esquivel, más allá de la buena temporada, del trabajo realizado semanalmente en Porvenir, “hay que tener la suerte del campeón”. Así, recordó que “en la primera rueda perdimos el invicto con Barrio Obrero, nos superó Centenario, pero nadie pensaba Centenario podía perder como perdió con Independencia”. Y en el Clausura fueron vitales esos dos puntos reclamados tras el empate frente a Barrio Obrero. “Ayende es buen dirigente y está atento a las distintas situaciones, como por ejemplo las amarillas nuestras y de los rivales. Con el reclamo se ganaron dos puntos importantísimos, porque después perdemos con Juventud pero empata Bella Vista, y llegamos con chances a ese partido final ante Independiente. En esa segunda rueda también tuvimos la suerte del campeón”.
Justamente Esquivel hizo referencia al último rival del campeonato y a los equipos a los que se enfrentó el representante de Porvenir. “Independiente es complicado, durísimo, como todos los equipos. Acá no hay cuadros fáciles sino que, por el contrario, sigo insistiendo que el fútbol de Paysandú es el más difícil, aunque no ganemos nada”, dijo. El entrenador afirmó que más allá del trabajo que se pudo realizar y de la suerte del campeón, “se gana en el período de pases”. Y es por eso que “en estos años en los que estamos trabajando juntos con Ayende, estamos en permanente contacto por diferentes motivos, dándonos una mano mutuamente, incluso cuando se evaluó el período de pases. Y se convocaron jugadores de muy buen nivel, porque tenemos a los goleadores y al arco menos vencido”. Esquivel destacó el trabajo “de un gran preparador físico como Milton Vignolo, y la incorporación de Algalarrondo como ayudante de campo, porque facilitaron todo. Esto fue un proceso, y nos habíamos quedado con las ganas el año pasado, cuando ganamos el acumulado pero no tuvimos ventaja ninguna en la definición de la Liguilla. Este año lo cerramos antes, pero son cosas que hay que corregir de cara al futuro”.
Todavía no se pasa raya, más allá de la alegría. Como dijo el presidente de 18 de Julio hace pocos días, ahora el objetivo está en la Copa Nacional de Clubes. “Ahora se sueña más que nunca con la Copa, los jugadores están compenetrados y coincidimos todos en que no se puede entrar para pasear, porque los equipos se refuerzan más que las selecciones. Dios quiera que la ilusión que todos tenemos se logre. Los sueños están desde el año pasado”, indicó. Por eso ya se piensa en las incorporaciones de cara al nuevo desafío. “En Paysandú hay muy buenos jugadores y no queremos que quienes vengan sean solo refuerzo, que jueguen pero no entrenen. Más allá de algunos nombres la prioridad la tendrán los futbolistas sanduceros, que pueden trabajar todos los días, porque nos hemos chocado mucho el alambrado con esas cosas”, señaló Esquivel, quien agradeció a la gente de Porvenir, del Municipio, a su familia y al presidente y la gente que lo rodea.