Nacionales | 14 Nov Más de 2.000 auxiliares de enfermería y servicio que trabajan en los CTI públicos de todo el país amenazan con renunciar en bloque, mientras afirman que la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) les bajó de manera drástica sus salarios.
“Estamos pensando en presentar todos la renuncia y en hacer abandono de los cargos. Esto de que ASSE remedie irregularidades con más irregularidades no es algo que nosotros vayamos a tolerar”, dijo a El País el secretario general de la Asociación de Funcionarios de ASSE (Afasse), Luis Pérez.
Según los funcionarios, unos 2.000 empleados (auxiliares de enfermería y de servicio) de todos los hospitales públicos del país recibieron el pasado 7 de febrero el sueldo, y aunque a sus manos llegó la misma plata de siempre, en el recibo el dinero se divide en salario más una compensación.
Representantes de Afasse y de ASSE se reunirán hoy en el marco de la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) y tras el encuentro, los trabajadores decidirán las medidas a adoptar. La resolución de ASSE, según el gremio, los puede perjudicar de tres maneras. Se calcularán los aumentos solo por una parte del salario real, que es lo que cobran sin contar el complemento. Por otro lado, la administración también tendrá la libertad de achicar el complemento y sacar de ahí los aumentos futuros, de manera que lo que llegue al bolsillo de los trabajadores no se vea modificado; en tercer lugar, ASSE de esta manera tendrá la libertad de quitar esa compensación cuando lo entienda pertinente.
Según Pérez, al pagarle a los auxiliares de enfermería de los CTI unos $ 15.847, percibirán “un sueldo menor al de un grado tres de mutualista, cuando para trabajar en terapia intensiva alguien debe ser grado uno, o por lo menos grado dos”.