Rurales | 07 Dic Bill Lauenroth, experto norteamericano de la Universidad de Wyoming, especialista en ecohidrología, ecología y manejo de pastizales, subrayó a EL TELEGRAFO la importancia de “preservar el bienestar de los pastizales en Uruguay”.
Organizada por la Mesa de Ganadería sobre Campo Natural y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), con el apoyo del Instituto Plan Agropecuario, el profesional de Estados Unidos, considerado uno de los principales investigadores de pasturas naturales en el mundo, brindó una charla en las instalaciones de Copagran, filial Paysandú.
Es la segunda oportunidad que visita nuestro país, donde manifestó que “hay muchas maneras de proteger los pastizales, utilizando diversos productos que son característicos de Estados Unidos”.
Argumentó que se utilizan formas naturales de cuidado, “porque usar químicos encarece los costos que pueden manejar”. Además, entiende que las ganancias que dejan los pastizales “hace inviable utilizar químicos. Por lo tanto, con rotaciones de animales se puede lograr el manejo adecuado de los pastizales”.
El investigador permaneció en el país durante toda la semana asesorando a la Mesa de Ganadería del Campo Natural de Uruguay, sobre incentivos y regulaciones para la conservación de campo natural.
El experto no solo trabaja en ecología básica de los pastizales, “sino en todo lo relacionado al manejo de las pasturas y tiene un conocimiento muy amplio de lo que sucede”, dijo a EL TELEGRAFO el ingeniero agrónomo José Paruelo, experto del área de Recursos Naturales de la Universidad de Buenos Aires, Argentina.
Paruelo, quien ha estudiado a lo largo de su carrera distintos aspectos de la estructura y funcionamiento de los ecosistemas, indicó que “lo importante es cómo enfrentar las amenazas que tienen los pastizales --en esta región de América del Sur denominados pasturas naturales-- que por un lado tiene que ver con la pérdida de área de los pastizales, a veces justificadas y otras no, porque se transforman para hacer agricultura cuando las condiciones no son las apropiadas”.
Sostuvo que la otra amenaza “es la degradación de los pastizales. Cuestiones del manejo o una serie de situaciones adversas que llevan a los pastizales a perder su capacidad productiva para producir carne con el ganado, pero también otra serie de servicios que nos brindan los pastizales”.
En sus estudios realizados en Argentina, el profesional describe la heterogeneidad de la vegetación y el paisaje en áreas de pastizales y arbustos, la dinámica del agua y el carbono en sistemas áridos y la influencia de las actividades antrópicas sobre los ecosistemas.
Sus trabajos cubren distintas escalas, desde análisis a nivel continental a estudios en parcelas experimentales, y diversas áreas biogeográficas (la Patagonia argentina, los pastizales argentinos y uruguayos, las zonas áridas del sur de España, las grandes planicies norteamericanas, el Chaco sudamericano). Las aproximaciones experimentales de sus estudios incluyen desde experimentos en invernáculos hasta análisis basados en técnicas de teledetección y modelos de simulación.
Paruelo expresó que “hay una transformación muy importante que está reduciendo la superficie de pasturas naturales en Uruguay a una tasa muy elevada.
Es una decisión que debe tomarse muy seriamente, no por decir que nunca hay que transformar un pastizal, sino porque cuando se transforma sin la debida reflexión, en unas horas con un tractor y un arado, se destruye lo que cuesta cientos de años en recuperar, por lo que debe ser una decisión muy meditada y cuidadosamente planificada”.
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Una de las investigaciones que comenzó a hacer la mesa cuando se conformó en nuestro país --al frente está el ingeniero agrónomo Marcelo Pereira Machín-- fue un relevamiento a nivel del mundo de qué han hecho otros países con respecto a este tema y, precisamente, Lauenroth aportó su experiencia.
Es la primera vez que todas las instituciones, como el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), el Instituto Plan Agropecuario (IPA), la Facultad de Agronomía y Facultad de Ciencias, brindaron conceptualmente el mismo mensaje, con las aristas que le corresponden a cada institución.