Seminario en Tacuarembó

Rurales | 12 Dic En la víspera se inició, en la sede del INIA Tacuarembó, el seminario de actualización “Alternativas tecnológicas para los sistemas ganaderos de basalto”, organizado por el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria y con una importante presencia de técnicos y productores del norte del país.
En la inauguración del seminario, que continúa hoy, el director de la regional, ingeniero agrónomo Gustavo Brito, señaló los desafíos para la investigación y los avances que se ha tenido desde el foro de basalto realizado en Artigas en 1998.
Claramente se destacó el crecimiento de la agricultura en el país, del cual el basalto no ha sido exento y que ha generado desafíos para los productores en las diferentes áreas, ya sea vacuna, ovino o en la propia agricultura. Sin embargo, Brito dijo que “la ganadería continúa siendo el sistema esencial en los sistemas de basalto”.
En el rubro ovino, se marcó el importante descenso que ha tenido la especie en el país. “Si comparamos con el 98, el stock ovino bajo a la mitad”, indicó Brito. No obstante, aclaró que “en el basalto la oveja de cría creció un 75%, pasando de 2,5 a 4,5 millones de cabezas y eso significa que el productor continúa creyendo en el rubro ovino y esto es un desafío muy importante para esta zona”.
La ganadería vacuna, que también ha sufrido cambios, concentra el 38% del stock ganadero del país. “La ganadería ha sufrido un proceso productivo importante en los últimos años y ha logrado levantar la eficiencia productiva por individuo”, explicó.
Para el director de INIA Tacuarembó, la información presentada por Opypa en su anuario 2013, donde se da cuenta que “el basalto es una de las zonas con mayor crecimiento en productividad en cuanto a peso vivo por hectárea, siendo la segunda en el país”, es el principal desafío para la investigación y la producción. Uno de los mayores debes que se ha tenido y que le demandará un esfuerzo mayor, tanto a técnicos como a productores, es el área de mejoramiento de suelos y pasturas mejoradas. Según Brito, principalmente el área de investigación de pasturas y campo natural deberán “ir generando estudios y evaluaciones de diferentes variedades y especies forrajeras para poder seguir pensando en esa opción de aumento de forraje”.