Guillermo Pérez

Deportes | 29 Dic “Salió un lindo partido. Nos sirve movernos con un equipo que mueve la pelota, que juega bien y es inteligente. Sirve mucho para corregir errores”, expresó el zaguero sanducero Guillermo Pérez una vez culminado el encuentro amistoso en el que la Blanca igualó sin goles ante Rivera.
Sobre el partido, en el que si bien a Paysandú le faltó mayor juego mejoró bastante en el segundo tiempo, el zaguero comentó que “en el primer tiempo dominaron ellos, nos ganaron la mitad de la cancha nos anticipaban, quizás el nerviosismo no dejó demostrar a lo que Paysandú quiere jugar, porque queremos jugar y no ser reiterativos con el pelotazo. Pero en el segundo tiempo salimos mejor, lástima que no pudimos hacer un gol, pero lo positivo es que mantuvimos el cero en nuestro arco”. Rivera fue el primer amistoso exigente para el equipo que orienta Antonio Cáceres y eso fue visto con buenos ojos por el plantel y el entrenador. “Estos partidos son los mejores, lo más importante es que fue con un equipo que siempre esta peleando el campeonato y tiene jugadores importantes. Es el primer amistoso que tenemos en el año de exigencia, contra un rival que también va a estar en el Nacional, y por suerte todavía tenemos tiempo para ir afinando los errores y sobre todo reafirmar las virtudes nuestras”, señaló el defensa.
“Falta soltarnos más, en la parte física estamos medios lentos, falta confianza y animarse a jugar”, explicó Pérez en cuanto a lo que quedó en el debe luego del primer amistoso.
La nota del encuentro la dieron los árbitros quienes se retiraron del campo de juego porque se sintieron “amenazados”.
Esto dejó muy molesto al público presente y a los dos planteles, por lo que Pérez fue muy claro diciendo que “hay cosas que se pueden solucionar de otra manera, yo no soy juez ni quiero meterme en la piel de ellos, pero capaz que echaba a los dos (jugadores involucrados en el incidente) y estaba pronto”.
Pero, más allá de eso, “hay que pensar que lo importante era que Paysandú llegue con rodaje para el 10 de enero y respetar a Rivera que viajó 500 kilómetros para jugar y a la gente que pagó para ver el espectáculo”.