Paysandú, Martes 13 de Enero de 2015
Locales | 06 Ene El vidente uruguayo Marcelo Acquistapace predijo hace algunos días, entre otras cosas, que en 2015 habrá varias inundaciones. Como dándole razón, en los primeros días de enero el Uruguay se ha salido de cauce y ha superado ya los 5 metros que, en una primera instancia, se había indicado sería el máximo nivel que alcanzaría. Ahora, la nueva previsión es de 6,50 metros, que alcanzará el jueves y provocará desplazados, por lo que en la víspera quedó constituido el Comité Departamental de Emergencias, convocado por el coordinador del Centro Coordinador de Emergencias Departamental (Cecoed), Marcelo Benítez. La presidencia del comité, en tanto, quedó en manos del director de Servicios (en ejercicio), Walter Bergara.
Intensas lluvias en el sur de Brasil y el norte argentino, así como lluvias en el centro y sur de Uruguay, provocaron inundaciones por encima de lo previsto. En provincias como Misiones y Corrientes, fuertes tormentas se abatieron sobre varias regiones a fin de año y comienzo de 2015, provocando cientos de desplazados y muertos.
En Paysandú, con el río a 5,30 metros y creciendo, con una cota de seguridad de 5,60 metros, ya se produjeron cuatro evacuados en la víspera en Solís, al oeste de Ledesma, quienes residían por debajo de la cota 8, zona no habilitada para vivir. Para hoy se espera que las evacuaciones continúen, en la medida en que el río muy probablemente alcance o supere el nivel de 5,60 metros.
Al mediodía de ayer, los integrantes del Comité Departamental de Emergencias se reunieron en la sede del Cecoed para evaluar los informes de la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande, hacer una lista de los recursos disponibles y poner al sistema en alerta.
El presidente en ejercicio del comité, Walter Bergara, dijo que “esta inundación ha llegado con algo de sorpresa, pero una vez enterados de lo pronosticado, reunimos a todos los integrantes del comité y ya estamos trabajando y estaremos en sesión permanente”.
“Se estima que el río llegará a 6,50 el jueves y hemos comprobado que las previsiones de Salto Grande han sido muy exactas, por lo que con Policía y Prefectura comunicaremos a los vecinos de la zona que podría quedar inundada lo que va a ocurrir, para que aquellos que puedan autoevacuarse, lo hagan lo antes posible y durante horas diurnas. Como siempre, el comité puede disponer el transporte para esas ocasiones”. Esto, precisamente, comenzó a llevarse a cabo en la tarde de ayer.
Se prevé que “al menos por unos diez días el río Uruguay estará fuera de cauce, no solamente por el agua que viene del norte, sino también porque aguas abajo se produjo un enlentecimiento en la salida al cauce natural del Río de la Plata”.
El nivel de embalse de la represa de Salto Grande en la víspera era de 34,15, con un caudal evacuado de 16.994 metros cúbicos por segundo. De ese total, por turbinas se evacuaban 7.976 metros cúbicos por segundo y por vertederos, 9.018 metros cuadrados por segundo. Al evacuar más por vertederos que por el sistema de generación hidroeléctrica, queda claro que se está tratando de reducir la cota del embalse, en previsión de que continuarán llegando grandes volúmenes de agua en las próximas horas.
LA SITUACIÓN EN MISIONES
Como ya fuera informado, con el hallazgo del cuerpo de Daniela, una nena de 10 años, se elevó a seis el número de víctimas fatales que se cobró el temporal que se desató sobre Misiones, entre el miércoles y el jueves, cuando precisamente se estaba celebrando la llegada del Año Nuevo. Ese temporal provocó el desborde de decenas de arroyos. Si bien la situación se normalizó con el cese de las precipitaciones y los evacuados volvieron a sus casas, se pronostican nuevas tormentas para toda la región. Tres hombres, una mujer y una niña murieron ahogados tras ser arrastrados por la fuerte correntada de los arroyos, mientras que la sexta víctima fue un motociclista que falleció aplastado por un árbol cuando transitaba por la ruta provincial 20, en el norte de la provincia. El caso más dramático se vivió en Oberá, donde perdió la vida Raúl Parra, un vendedor ambulante de 46 años, quien se arrojó a las enfurecidas aguas del arroyo Mbotaby para salvar a un chico de 7 años, quien era arrastrado por la corriente.
En Misiones todavía persisten las secuelas del temporal, que en algunas zonas estuvo acompañado por ráfagas de viento que provocaron daños en techos.
La cantidad de agua caída en pocas horas provocó el colapso y desborde de los arroyos, lo que obligó a interrumpir temporalmente el tránsito sobre la ruta nacional 12 –que conduce a Cataratas-- a la altura de Capioví y Garuhapé.
Con el descenso del caudal, se reabrió la circulación pero solo de automóviles y vehículos medianos, porque el agua socavó las cabeceras. Los camiones de gran porte deben realizar un importante desvío.
La ruta provincial 17, la principal vía utilizada para viajar a Brasil, sufrió el deslizamiento de la banquina en una zona de serranías y el puente sobre el arroyo Piray Guazú quedó sin barandas, luego de que el agua superara el nivel de la calzada. Debido al importante tránsito diario --pasan más de 300 autos con turistas que van a Camboriú y zonas aledañas-- la Policía pidió precaución.
El temporal también dañó las redes eléctricas y todavía quedan algunos barrios de Posadas a oscuras. Desde la empresa Electricidad, de Misiones Sociedad Anónima, dijeron que lograron reparar las redes troncales y los trabajos continuaban en las de media y baja tensión.
Misiones había sido golpeada por las inundaciones el año pasado. En junio, las intensas lluvias llevaron el caudal del río Iguazú a 47.000 metros cúbicos por segundo --35 veces más de lo habitual-- y causaron daños en la pasarela que conduce a la Garganta del Diablo.
Ese paseo recién fue rehabilitado en diciembre pasado. Unas semanas después, desbordó el río Uruguay, que dejó sin casa a más de 300 familias. En 2014, en Misiones cayeron 3.000 milímetros, muy por encima del promedio de 1.939 milímetros, e incluso superior a los 2.756 milímetros de 1983.
LA EMERGENCIA EN CORRIENTES
En Corrientes, pese a que el clima dio una tregua en los últimos días, las inundaciones a causa de las torrenciales lluvias, especialmente en el centro de la provincia, obligaron a mantener evacuadas a más de 900 personas, la mayoría de ellas de la zona de Santa Lucía, localidad que fue afectada por el desborde del río homónimo.
Según informó Defensa Civil, unas 600 personas fueron evacuadas en la ciudad del sur correntino. A ellas se suman otras 70 en Perugorría y cientos en parajes de los departamentos de Goya y Esquina, donde la situación está controlada en las zonas urbanas. Mientras tanto, en la costa del río Uruguay, el panorama se complica a partir de la crecida de este curso, producto de las intensas lluvias en el sur del Brasil.
La localidad de Garruchos entró ya en etapa de evacuación. A esta situación hay que sumar los cientos de personas que quedaron aisladas en parajes del interior correntino, producto de los desbordes de los ríos Corriente, Santa Lucía, Batel y los arroyos que reciben sus aguas, lo que dificulta además el avance de máquinas para la limpieza de canales. El Servicio Meteorológico Nacional anunció más lluvias entre hoy martes y el jueves venidero.
El gobierno provincial dispuso de escuelas en Santa Lucía para el alojamiento de los evacuados y montó carpas en complejos polideportivos.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Ene / 2015
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com