Deportes | 12 Ene La selección mayor de rugby masculino, Los Teros, cumplieron de muy buena manera con su primera semana de pretemporada con miras al Mundial de Inglaterra. Hoy continuarán con una nueva semana de entrenamientos, que se repetirán de esta manera hasta marzo en el Estadio Charrúa en Montevideo, que se convirtió desde hace un tiempo en la base de operaciones de los combinados de rugby.
“La verdad que estuvo muy buena esta semana, muy cansadora, pero la verdad que muy linda”, señaló a EL TELEGRAFO uno de los jugadores de Trébol que integra el plantel, Alejo Durán. “La primera hora y media hacemos rugby con técnica individual y grupal, mientras que la otra hora y media hacemos pesas. Sirvió mucho la post temporada que habíamos hecho en diciembre, pero igualmente terminamos muy cansados”, agregó.
La intención del cuerpo técnico de Los Teros es llegar al 100% al Mundial de Inglaterra, intentando no dar ventajas más allá de las que ya hay, teniendo en cuenta que los celestes son el único seleccionado amateur que estará presente en la cita mundialista con las mejores selecciones del planeta. Es por eso que el head coach Pablo Lemoine sigue muy de cerca los entrenamientos de sus dirigidos, arengándolos constantemente, corrigiendo defectos y resaltando las virtudes.
Los únicos que por el momento entrenan diferenciado son Franco Lamanna y Alejandro Nieto, quienes están en plena rehabilitación de sus operaciones de rodilla. Los Teros entrenan cuatro días a la semana, descansando los miércoles y los fines de semana, a la que se suman dos prácticas individuales para que los jugadores se perfeccionen en distintas áreas.
Aún no se sabe bien cuándo se jugará el primer amistoso preparatorio de cara al Mundial debido a que no se llevaría adelante la gira por Sudáfrica que estaba programada para febrero. El primer ensayo sería el 7 de marzo en nuestro país, aunque todavía resta por confirmar los rivales dado que sería un cuadrangular. Sobre la posibilidad de jugar en nuestra ciudad en mayo ante Argentina y Fiji, Durán dijo que “sería algo divino porque además serían de los últimos partidos en Uruguay, sería la despedida para el Mundial y poder hacerlo en Paysandú sería muy lindo”.