Locales | 20 Ene “Pensar que una fiesta de promoción de un destino turístico, que costó 15.000 dólares, se reduce a si faltaron media docena de manteles y algunos floreros, y quién se los llevó, es no conocer lo que ocurre en cada uno de los eventos, no solamente de este tipo, al que concurren cientos de personas”, dijo a EL TELEGRAFO el director de Turismo, Andrés Mannise, al salir al cruce de las acusaciones de Mónica Lozano, encargada del área Producto Termal y Planeamiento Estratégico del Ministerio de Turismo y Deporte (Mintur).
Lozano, primero por correo electrónico y luego en las redes sociales, acusó a las intendencias de Paysandú y de Salto por el faltante de seis manteles con un costo de 600 pesos cada uno (3.600 pesos) y de nueve floreros que decoraban las mesas, cada uno con un valor de 250 pesos (2.250 pesos; en total 5.850 pesos). “Recibimos la notificación y realmente no fue un tema que me preocupara; es algo común, ocurre siempre y todo lo que se hace es pagar lo que corresponde, porque siempre hay faltantes en una fiesta como la realizada”, indicó Mannise.
“Lo que me extraña es que no ha hablado de las copas que se rompieron y que también hay que pagar, como corresponde, y como ocurre en cada fiesta o reunión grande”, destacó el Director de Turismo.
A la “Fiesta del Verano de Destino Termas” concurrieron autoridades nacionales y departamentales, operadores turísticos, figuras del espectáculo y el deporte, y periodistas. El costo de la fiesta, realizada en el Cantegril Country Club de Punta del Este fue de 15.000 dólares (unos 375.000 pesos) y fue pagada en conjunto por Mintur y las intendencias de Paysandú y Salto.
“No tengo idea de qué ocurrió con los manteles y los arreglos florales. Sí puedo decir que cuando nos retiramos, había manteles y floreros en las mesas”, recordó Mannise. “Pero de ahí a suponer que operadores privados de intachable prestigio o autoridades nacionales van a andar llevándose un mantel es algo que está fuera de toda lógica”. Aseguró que “lo único que esto deja en claro es la muy escasa experiencia de Mónica Lozano en este tipo de eventos. Realmente le falta experiencia para asumir los desafíos de una organización de este tipo, donde esta clase de faltantes siempre ocurre y donde siempre, también, los organizadores pagamos los costos sin mayores inconvenientes, porque antes de realizarlo ya sabemos que esto ocurrirá”. “La responsable de la fiesta era Lozano, por tanto debió tomar las precauciones para reducir este tipo de hechos que pasan, porque siempre hay quien quiere un suvenir. Para mí esto es algo que está mal enfocado. No se me ocurriría acusar a nadie y me molesta profundamente que se me quiera --en alguna medida es así-- acusarme a mí. Así no se procede. Esto está fuera de toda lógica”, dijo Mannise.
“Si a la fiesta la medimos porque faltaron seis manteles, no estamos entendiendo nada de lo que es promoción turística, y me preocupa que quien no entiende nada está a cargo del tema”, aseguró refiriéndose a que Mónica Lozano es la encargada en el Mintur de la promoción de la región termal.
“Si la promoción de un destino pasa porque solo se hable de los manteles que faltaron --y reitero, falta hablar de las copas que se rompieron-- y si los medios de prensa dan preferencia a esto en lugar de apuntar al cumplimiento del objetivo de promoción que genera la presentación de Destino Termas, estamos mal. Y todo el esfuerzo de los promotores privados se pone en duda también. Y eso, creo, no es razonable. Mucho menos cuando viene de alguien dentro del propio ministerio. Salvo, claro, que esa persona en particular sea, además, un agitador político, lo que yo personalmente mucho lamentaría”, concluyó Mannise.