Locales | 29 Ene El Anexo Penitenciario Unidad 16 (la exchacra policial) recibió herramientas para un taller de carpintería. La entrega respondió a un programa establecido en el marco del convenio de cooperación entre el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y la Dirección Nacional de Empleo (Dinae), instrumentado por el Centro Público de Empleo (CEPE) que funciona conjuntamente con la Intendencia Departamental de Paysandú y el Área de Emprendimientos Productivos de la Dinae. Se entregó una máquina combinada de carpintería de seis funciones, una lijadora de banda, una caladora, una soldadora eléctrica, lentes de seguridad, zapatos de seguridad, delantales de cuero y guantes. En el taller de carpintería se podrán armar mesas, sillas, ventanas y cuchetas.
El intendente Bertil Bentos, la secretaria general Mónica Peralta, la directora de la Dinae, Gabriela Rodríguez, el comisario inspector Enrique Mesa del INR, el comisario Alfredo Coelho, director del Centro de Rehabilitación, el director general de Servicios, Rúben Álvarez, el director general de Obras, Nicolás Olivera y el coordinador del CEPE, Gustavo Estefanell, se contaron entre los presentes en el acto en que se firmó el acta de entrega. También participaron varios de los veinte internos.
El acta fue firmado por Bentos, Mesa, Rodríguez, Álvarez, Coelho y Estefanell. El emprendimiento recibió apoyo en el marco del Programa de Inversión Productiva, como lo establece el artículo 317 literal C de la ley 17.930, que faculta a la Dinae a administrar fondos rotatorios departamentales.
En Paysandú ese fondo ha otorgado 63 planes en todo el departamento, según dijo Estefanell. Y el fondo rotatorio tiene un millón y medio de pesos para continuar apoyando otras pequeñas inversiones, que luego retornan mediante el pago de cuotas de los beneficiarios. Paysandú desarrolla este programa desde el 18 de noviembre de 2010, cuando se procedió a la firma del acuerdo con la Dinae.

UNA PROFESIÓN PARA LOS INTERNOS
La directora de la Dinae recordó que en el año 2011 junto con el MTSS “iniciamos una tarea conjunta a través de acciones puntuales, detectando una necesidad en el centro de reclusión del cerro Campanero en Minas. Allí, con una serie de instituciones públicas, organizamos un par de talleres de capacitación para las personas privadas de libertad”.
“Eso dio pie a que el Ministerio del Interior invitara al MTSS a un proceso de diálogo sobre la participación en formación y empleo para personas que están privadas de libertad”, agregó. Esas conversaciones desembocaron en el criterio de que “las personas privadas de libertad han perdido uno de los derechos fundamentales, por los hechos que han protagonizado. Pero, si bien es un derecho muy importante, eso no significa que pierdan otros como formación, educación y trabajo.
Estos derechos permanecen. Así surgieron una serie de acuerdos”, acotó.
Posteriormente se comenzaron a desarrollar talleres de capacitación en varias partes del país, incluido Paysandú. Además de esa capacitación, se otorgan préstamos “que se reintegran. Se presta en equipamiento y luego el dinero vuelve con el pago de las cuotas”, indicó Rodríguez. “En este año en particular, la Intendencia de Paysandú hizo un aporte específico de fondos (de 140.000 pesos), que fue el que permite que hoy se esté haciendo entrega de esta maquinaria”.
“Esto permitirá el trabajo de los internos, pero además aprender una profesión, adquirir una herramienta que les servirá una vez que sean liberados, para poder ingresar al mercado laboral”.

MERCADO LABORAL MUY COMPETITIVO
“El mercado laboral es muy competitivo y si pretendemos que estas personas cuando sean liberadas consigan una plaza laboral, en este tiempo en que están privados de libertad pueden hacer que no sea tiempo perdido, aprendiendo este oficio, capacitándose, para facilitar un posterior trabajo”, indicó por su lado Enrique Mesa.
Por otra parte, reveló que “dadas las características del centro penitenciario de Paysandú, y de este anexo, el Instituto Nacional de Rehabilitación ha recibido unas cuatrocientas peticiones para ser trasladados a Paysandú, de quienes están recluidos en otros departamentos y tienen familia acá, la que debe trasladarse para poder visitarlos. Por eso creo que las personas que están acá, en este anexo, tienen que cuidar esta posibilidad. Y si hacemos las cosas bien, este emprendimiento podrá ser ampliado posteriormente con yeso y con carpintería de aluminio”.