Fabián Coito

Deportes | 09 Feb Fabián Coito, técnico de la selección uruguaya Sub 20, dejó en claro tras el partido que el vestuario celeste estaba inmerso en la “tristeza y desazón” tras la derrota ante Argentina, y destacó más allá de que se esfumó la posibilidad de alcanzar el título y la clasificación a los Juegos Olímpicos que “logramos uno de los objetivos, que era clasificar al Mundial”.
“El otro era ganar el torneo, pero estoy conforme con lo que dejaron estos futbolistas, a los que no hay nada para reprochar”, pero “hay que mejorar en lo futbolístico porque hay que sumar armas para ganar”, dijo pensando en el próximo gran desafío, la cita mundialista de Nueva Zelanda.
El entrenador afirmó que, si bien “perdimos con un buen equipo, en algunas situaciones dio la sensación que no tenía claridad, pero encontró el empate y a partir de ahí empezó a complicarse el partido para nosotros, porque arriesgamos y encontraron los espacios”.
Sin dudas que Uruguay perdió mucho con la salida por lesión de Rodrigo Amaral, el jugador diferente y destacado, que pese a dar gran ventaja con la edad (fue la gran apuesta de Coito y le salió bien) dejó en claro que le aporta frescura al equipo y un fútbol diferente.
El jugador sufrió luxación de hombro sobre el final del primer tiempo, y no saltó a la cancha para el complemento, lo que Uruguay pagó caro: a lo largo del segundo tiempo los celestes prácticamente no llegaron al área con pelota dominada. “Es un gran jugador de ataque, con capacidad de maniobra y no es fácil encontrar un sustituto para un jugador de esas características”, recordó, pero dejó en claro que “más allá de que en un partido parejo y dividido, en el que nos arrimamos al área sin mucha claridad aunque tampoco la tenía Argentina, debimos cuidar un poco más el 1 a 0”.
El técnico anunció que al día siguiente, es decir ayer, viajaría rumbo a Nueva Zelanda junto a otras autoridades de la AUF para mañana participar del sorteo del Mundial.