PRESIDENTE DE LA SOCIEDAD RURAL DE DURAZNO

Rurales | 07 Mar El presidente de la Sociedad Rural de Durazno (SRD), Alvaro Bentancur, señaló a EL TELEGRAFO que “cuesta creer que siga pasando el tiempo y por negligencia y fallas conceptuales no se solucionen aspectos importantes en torno al abigeato, que se ha convertido en un gran negocio y de muchísima plata”, al tiempo que criticó duramente a los legisladores que “despatarraron todo un proyecto que surgió de la Comisión de Seguridad Rural y que hoy no sirve para nada”.
Muy molesto por lo que sucede en el país, el dirigente y productor indicó que “actualmente del abigeato se está aprovechando un número importante de gente, mientras se lo ve como si fuera un delito social en donde antes alguno muy desesperado carneaba una oveja para comer y hoy son organizaciones”. Sucede que “la Justicia no aplica aparentemente la ley”, dijo. “Yo creo que si alguien entra a mi casa, abre el ropero y me lleva la plata, es un delito, y no se toma como un delito que alguien entre a tu campo y te faene una vaca o una oveja, tratándose de gente que no lo hace como un sustento de vida”, acotó.
Entiende que “muchas veces el animal que se faena es un ejemplar destinado al consumo de la familia y otras veces para generar los recursos que permitan mandar los gurises a la escuela y eso no se mide con la misma vara, por lo que la situación es preocupante”.
Bantancur aclaró que eso es desde el punto de vista social, “pero es algo que debe tener una política de Estado, porque en el país tenemos áreas de tierras que son aptas para la producción ovina, que es una producción básicamente de productores chicos y medianos y familiar. Pero muchos productores dejaron de producir lanares a causa de ese delito”.
“No hay nadie que se ocupe de esto”, enfatizó. “No es de preocuparse, es de ocuparse de la gente. Para eso la Federación Rural hizo una ronda de reuniones en todo el país, juntando a todos los actores del sistema: la Justicia, los fiscales, la Policía, etcétera. Se hizo un proyecto de ley que salió consensuada por todos quienes integran la Comisión de Seguridad Rural, pero cuando llegó al Parlamento, la despatarraron toda, la digitaron y salió una cosa que no sirve para nada”.
Sostuvo que “si se trata de contar con una ley que la confeccionó gente que se capacitó para hacerla, cuando le llega al sector político deben leerla y decir amén, está bien. Pero acá parece que no, que esta gente sabe más que quien se ocupó de andar detrás de las cosas para ilustrar lo que sucede”.
EFECTO
Para el titular de la gremial del centro del país, que inició en la víspera su tradicional exposición de reproductores, “el efecto que el abigeato produce es muy importante, porque no se pena como debe ser”. Brindando su respaldo al accionar de la Policía, expresó que “la Policía rural es la que trabaja en esto y ojalá que siga habiendo policías en el campo como los que hay, pero cada vez que detiene a una persona, se gana un enemigo, y si lo va a llevar para que lo suelten al rato, no va a querer detener a más nadie”.
Para dejar más claro su concepto, brindó un ejemplo: “Si uno no le brinda el ejemplo a los hijos de que está bien y que no, cuando sean grandes cada uno va a hacer lo que le parece en tanto nadie le diga que llegó hasta acá. Y esto es lo mismo”. De todas maneras, subrayó que “no hay que entregarse, y es absolutamente de locos que tenga que haber gente armada recorriendo lo suyo, por si anda alguien”. Precisó que “si el productor está en un momento de calentura --hablando mal y pronto-- y le da una paliza o le pega un balazo a alguien, el productor que quiere defender lo suyo queda detrás de las rejas y el ladrón queda suelto”. El presidente de la Sociedad Rural de Durazno consideró que “el sistema está obligando a alguien cuya función es producir, a andar con un arma vigilando. Es un tema muy preocupante, pero porque nadie se ocupa”.