Locales | 09 Mar El exministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, destacó que el norte del país sostiene diferencias favorables con respecto al sur, vinculado a mejoras sanitarias e indicadores de pobreza y calidad de empleo.
A mediados del año pasado, el entonces presidente José Mujica solicitó “un informe para conocer la evolución de las variables institucionales por departamento” y tras delinear “diez años de los gobiernos del Frente Amplio, quedé bastante impactado con las diferencias de mejoras al norte del Río Negro con respecto al sur. Los departamentos de Artigas, Salto, Paysandú, Tacuarembó, Rivera, además de Cerro Largo y Treinta y Tres mostraron indicadores con mayor crecimiento con respecto a la calidad de vida, desempleo, pobreza, mortalidad infantil, inclusión educativa y vivienda, en comparación con el resto del país”, precisó.
Según Olesker, en el caso de Paysandú, el exintendente Julio Pintos “asumió en un período muy duro para el país con un Plan de Emergencia orientado al 40% de la pobreza, un 15,7% de desempleo, un 5% de indigencia y con una mortalidad infantil por encima del 14 por mil. En Artigas o Cerro Largo, por ejemplo, superaban 20 o 25 por mil”.
El exsecretario de Estado y senador suplente de Mónica Xavier por el Partido Socialista apoya la candidatura de Pintos y remarcó que “alcanza con una recorrida por el departamento para constatar el deterioro en la red vial y en otros aspectos importantes para el Mides, como las cooperativas sociales o los clasificadores que fueron apoyados por su intendencia; y en el siguiente período recurrimos a otros organismos para que no quedaran en banda”.
DESEMPLEO JUVENIL
Olesker recordó que en la Rendición de Cuentas correspondiente a 2013, con aplicación en 2014, se aprobó la Ley de Desempleo Juvenil, cuya reglamentación está pendiente. “Esta ley tiene cuatro componentes: uno para el sector público, que es menor, en tanto básicamente ofrece ciertas garantías de primera experiencia laboral; otro componente de trabajo protegido bajo los programas Objetivo Empleo o Uruguay Trabaja para jóvenes; y un programa de pasantías para graduados. El cuarto componente, y más importante, otorga un subsidio de hasta un 15% sobre un salario de $12.000 a las empresas que contraten a jóvenes. O sea que las empresas recibirán $ 3.000 de subsidio directo”, detalló.
La ley garantiza un incremento del empleo, “o sea que no quite a un empleado para colocar a un joven y ahorrar con el subsidio, además de brindar la posibilidad del estudio con la instrumentación de 6 horas laborales. En este caso, el Estado subsidia una parte si la empresa debe contratar a otro operario para completar la tarea, incluso otorga el beneficio de la licencia por estudio. El presupuesto inicial asignado se ubicó en U$S 2 millones para unos 5.000 puestos de trabajo que prioriza las cuestiones de género y condiciones de vulnerabilidad social”, dijo a EL TELEGRAFO.
El Pit-Cnt departamental manifestó su preocupación por el desempleo juvenil en Paysandú, que oscila en torno al 24%, en tanto según Olesker se trata de una realidad nacional que abarca al 21%. “En el caso de las mujeres jóvenes, llega al 30%”, añadió.
El exministro aclaró que esta ley no se enfoca a la contratación de jóvenes universitarios “porque los subsidios se otorgan para que alguien haga algo que no haría si el beneficio no existiera, además de los programas Yo estudio y Trabajo con 800 pasantías en empresas públicas por sorteos anuales que este mes realizará una nueva edición, y el PEL (Primera Experiencia Laboral) con cupos para discapacidad, trans o afrodescendientes”.

DOS MINISTERIOS
Durante la administración de José Mujica, Olesker ocupó el cargo de ministro de Salud Pública durante 2010-2011 y tras la renuncia de Ana María Vignoli, pasó al frente de la cartera de Desarrollo Social hasta febrero pasado.
El exsecretario de Estado que retorna al ámbito académico de tiempo completo, fue el creador del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS). “La reforma de la salud ha sido una de las principales contribuciones a la igualdad, que incluso lo demuestra el Banco Mundial con el índice de Gini. En orden es la reforma de la salud, le sigue la reforma tributaria y finalmente el régimen de asignaciones familiares”, precisó.
Según Olesker, “uno de los aspectos que demuestra el éxito de la reforma está planteado por los tiempos de espera que los usuarios denuncian como un problema. Eso claramente tiene que ver con una respuesta universal”.
Recordó que “durante la campaña de 2010, el Partido Nacional y el Partido Colorado --que no votaron la reforma-- decían que iban a derogar el SNIS. En la campaña de 2014, lejos de decir eso, aseguraron que es un sistema a mejorar. Es obvio que debe continuar una reforma que cuenta con el 69% de aprobación ciudadana”.
Explicó que su llegada al Ministerio de Desarrollo Social tuvo lugar durante un momento complicado. “Siempre recuerdo las palabras de Mujica cuando me dijo: 'estás en un lugar muy complicado, pero lo tenés dominado. Te voy a dar una changa más complicada y menos dominable' y así llegué al Mides que se encontraba muy bien valorado por los resultados del Plan de Emergencia, pero había comenzado a perder su identidad”.
Olesker destacó los estudios realizados durante su gestión sobre los porcentajes más pobres de la población y la georreferenciación. “Hicimos 145.000 visitas a hogares, lo que nos da ocho visitas por persona y por día, con una información absolutamente rigurosa y confiable casi de hogar por hogar. Eso ha permitido refocalizar a casi un 50% de la Tarjeta Uruguay Social que estaba mal enfocada”, puntualizó. Según el exministro, “el sistema de información y de conocimiento profundo de las características de la población vulnerable es el primer legado, el segundo corresponde a una reestructura con una dirección única de programas. En Paysandú tal vez esto no se notó porque la unidad en el trabajo siempre fue muy fuerte, pero en otros departamentos los servicios estaban dispersos. Pasamos de 70.000 a 215.000 atenciones entre 2011-2014 o sea que la reestructura resultó de importancia”.
Finalmente se refirió a los indicadores de pobreza. “La pobreza bajó del 40 al 10%; hay 690.000 pobres menos de los cuales 34.000 pertenecen a Paysandú. La pobreza extrema está prácticamente erradicada, resta ese núcleo duro de pobreza estructural que se encuentra en un 10%, pero forma parte de un sector donde es difícil que en el corto plazo se resuelva su situación, mientras reciben atención por los programas Jóvenes en Red, Uruguay Crece Contigo, Cercanías, Plan Juntos o tarjetas focalizadas”, concluyó.