Opinion | 13 Mar Que pasará no hay dudas. Y que tenemos muchas posibilidades de sobrevivirlo tampoco. Pero la tradición hace que esta jornada nos envuelva de temor, porque estamos viviendo hoy nada menos que el primer viernes 13 del año. Si, deberíamos temerle más al martes 13, pero la influencia estadounidense hasta nos cambia el día del temor, así que la fecha de la mala suerte parece que ahora es el viernes 13.
Por las dudas, tomémoslo con cuidado. 2015 va a ser un año malo para las personas que sufren paraskevidekatriafobia, nombre raro si los hay. Tan extraño como determinar que quienes sienten un temor profundo ante el viernes 13 tienen una enfermedad. La misma fue “descubierta” por el doctor Donald Dossey, un médico estadounidense que se dedica al tratamiento de fobias.
El periódico USA Today ya señaló que este año, los que tiene fobia a esta fecha lo van a pasar peor al haber tres viernes 13 en lugar de dos, como es habitual en otros años. La primera vez que se dio este hecho fue en 2001. Y la última en 2012. Menos mal, tendremos respiro en los próximos años, pues algo similar no ocurrirá hasta el 2026.
En realidad, hay tragedias que han marcado los viernes 13 a lo largo de la historia. Los uruguayos jamás olvidaremos el viernes 13 de octubre de 1972, cuando el vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya, con 45 personas a bordo, se estrelló en los Andes. El grupo estaba compuesto por jóvenes jugadores de rugby, sus amigos y parientes. Los sobrevivientes al choque quedaron atrapados por las montañas nevadas a casi 4.000 metros de altitud, sin comida suficiente, sin agua, sin vestimenta adecuada y soportando temperaturas inferiores a -30ºC.
Más cerca en el tiempo, el viernes 13 de enero de 2012 el Costa Concordia naufragó frente a la isla italiana de Giglio, en la región italiana de la Toscana en el mar Mediterráneo. Hubo 32 muertos y 4.197 evacuados.
Cambiante como es la sociedad, la historia y el día a día, la ciudad celebra hoy los 204 años de un montevideano que se convirtió en figura clave en la conformación del particular “ser sanducero”: Leandro Gómez, aunque en aquel 1811, no fue un viernes, sino un lunes.
Y como la vida es un cóctel, el que este aniversario coincida hoy con un viernes 13 puede indicar que hay que saber sobreponerse al miedo, al temor, que hay que enfrentar la realidad que nos toque vivir y sobrevivirla. Así pasó con la Sociedad de la Nieve de los rugbiers uruguayos allá en los Andes. También aquí, en este Paysandú heroico en aquellos días de la Defensa.
Por eso hoy, volvemos a luchar contra el miedo y recordamos a Leandro Gómez valorando su entrega, su defensa de los ideales, su lucha hasta el final, hasta sucumbir. Morir, a veces se debe, para vivir para siempre. Recordémoslo hoy, viernes 13. Lo que importa es la defensa de nuestro ser, de nuestro modo de vida. Sea el día que sea.