Paysandú, Miércoles 01 de Abril de 2015
Locales | 31 Mar En la presente columna se han comentado, con la frecuencia considerada razonable, los problemas del tránsito vehicular, y en las presentes circunstancias en las cuales se ha puesto en marcha la Semana de Turismo es sin duda muy oportuno volver al análisis de dicho tema.
Se entiende como muy útil al respecto reiterar la publicación ya realizada acerca de lo que se hace mal cuando se maneja en ruta, por su gran utilidad para que quienes conducen puedan advertir algo esencial que deben no hacer cuando circulan manejando un vehículo. A continuación algunos de los puntos destacados:
--No respetar la distancia de seguridad. Tal distancia equivale como mínimo a otro vehículo con respecto al que va adelante, y debe ser mayor dependiendo de la velocidad de circulación que prevalezca en la ruta.
--Ponerse metas en cuanto al horario de llegada a destino, lo que obliga a exceder los límites apropiados de velocidad.
--Adelantamientos incorrectos. Solo adelantarse cuando la faja esté abierta y se observa la carretera despejada. El choque de frente es uno de los que más fallecimientos provoca en nuestras carreteras y fue el que más se produjo durante ciertos lapsos anuales.
--Circular en zigzag. Su extremo es circular por la izquierda sin necesidad.
--Conducir sin mirar por los espejos retrovisores. Además suele ocurrir que alguno de los espejos esté en posición inadecuada para el conductor.
--Circular hablando por celular. Es ya muy frecuente y dificulta la atención sobre el manejo, con los sin duda graves riesgos que puede provocar.
--Llevar infantes en el asiento trasero sin las sillas adecuadas. Existen modelos obligatorios de acuerdo a la edad del infante. La silla se fija con el cinturón de seguridad. No usarla es una equivocación que puede ser fatal.
Cargar en exceso el vehículo. Ello pone en riesgo que en ciertas circunstancias exigentes que el vehículo mantenga el equilibrio. también puede afectarlo llevar más pasajeros que los lugares que tiene el vehículo para ellos.
--A ello se han agregado varios casos, entre ellos no controlar estado de cubiertas y su presión, el estado del sistema de enfriamiento o no descansar bien antes de un largo viaje.
Se considera que, aunque expuesta sintéticamente, la relación de las precauciones que se debería siempre tener cuando se ha resuelto realizar un viaje largo, en automóvil, es bastante ilustrativa para que se pueda, con claridad, apreciar el cúmulo de serios riesgos que se enfrentan cuando no se ajusta la conducta a tales requisitos.
La falta de tales previsiones, además de ser causa de riesgo para quien es directo responsable de la omisión, puede ser causa de graves consecuencias para muchos otros conductores y también para los integrantes de sus respectivas familias.
Lo expuesto es suficiente para cumplir el propósito que quien escribe se propuso. pero el tema no está agotado.
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